Ayer el Palacio de la Zarzuela estaba de enhorabuena. Sofía de Borbón cumplía 16 años y ya entraba en la última fase de la edad del pavo. Ahora podrá empezar a estudiar para el carné de conducir e incluso sacarse el teórico, por lo que Su Alteza Real está creciendo a pasos agigantados. Ayer comentábamos que la infanta tiene tics izquierdistas que pueden molestar a VOX, como el ecologista. Y hoy, para no fallar a la cita de curiosidades borbónicas, os comentamos otra anécdota surrealista de Sofía que seguro que no sabes. Para ello, nos tenemos que remontar al año 2007, cuando Dios trajo al mundo a la hija de Don Felipe y Doña Letizia.
Ya situados en el 29 de abril del año 2007, en la clínica Ruber Internacional de Madrid, Sofía llegaba al mundo gracias al parto de Letizia Ortiz. La entonces princesa de Asturias vivía su 2º -y hasta ahora último- parto, sin aparentes complicaciones. Sofía se convertía así en infanta de España y veía con sus propios ojos a Felipe, a Leti y a su yaya Sofía. Felipe llegó a confesar que "le hemos llamado así porque nos hace ilusión que su abuela tenga una nieta con su nombre". Con 3'3 kilos y medio metro clavado de altura, Sofía aterrizaba en el planeta Tierra. Aunque el parto no fuera duro, eso sí, pasó una cosa que no sucede en la gran mayoría de estos. Una cosa referente al cordón umbilical, conducto por el cual el bebé se alimenta durante todo el embarazo. Brutal lo que os vamos a contar.
Y es que a la recién nacida Sofía, como a todos los bebés, se le tuvo que cortar el cordón umbilical, el cual los une a la madre. Letizia y ella se desprendían de este cordón del cual los príncipes de Asturias ordenaron guardar toda la sangre. El motivo que dio Felipe fue que "la medicina ha avanzado mucho en este campo". Pues bien, dicho y hecho: la sangre del cordón umbilical de Sofía, al igual que pasó con el de la princesa Leonor, se almacenó por parte de los profesionales, que obedecieron a papá Felipe. Se extrajeron dos bolsas llenas de sangre que, quien sabe, se podrían usar en un futuro y podrán salvar vidas quizás. "Gracias a la precisión del doctor Recansens hemos podido extraer suficiente sangre para rellenar dos bolsas y una irá a un banco público y otra a un banco privado dentro del ámbito europeo", relataba el marido de Letizia Ortiz.
La Casa Real, solidaria
Felipe, Letizia y sus hijas siempre se han caracterizado por ser una familia solidaria. En múltiples ocasiones hemos visto a los reyes, a la princesa o a la infanta hacer actividades por el bien de la humanidad, pero esta que hicieron Leti y su esposo con Sofía fue muy muy altruista. Espectacular. En una nota de prensa difundida por Europa Press el mismo día del nacimiento de la susodicha, la agencia explicaba que "la congelación de las células madre procedentes de los recién nacidos permiten hacer frente en el futuro a posibles enfermedades, dado que estas células pueden generar los componentes principales de la sangre, de la médula ósea y del sistema inmunológico". De hecho, estas se utilizan en el tratamiento de graves enfermedades como la leucemia, el linfoma o algunos tumores, por lo que, como decíamos, pueden salvar vidas.