Las casas reales europeas siempre tienen picatostes. No se salva una. No solo aquí en España hay roces y conflictos, sino también en la Royal Family -la que más- y la monarquía de Suecia. Viajamos ahora hasta el país nórdico para saber más sobre una de las princesas, Sofía de Suecia. Sofia Kristina Hellqvist es la esposa del príncipe Carlos Felipe, hijo de los reyes Carlos Gustavo y Silvia. Ella siempre ha estado en entredicho dentro de la corona sueca, hasta tal punto que se ha llegado a enfrentar a su familia política. La historia del matrimonio de Carlos Felipe y Sofía es ahora una historia de amor y romance puro, pero para llegar hasta aquí han tenido que sortear muchos obstáculos...
Tal y como revela un podcast de la revista ¡HOLA!, Carlos Felipe era (y es) el hijo preferido del rey de Suecia, aunque no sea este el heredero. En su pasado estuvo de novios con una mujer, Emma Pernald, la cual tenía una relación muy buena con la familia real. No obstante, tras diez años de romance, esta aventura se acabó. Carlos Felipe confirmó a la prensa que esto se acababa y que tenía una nueva ilusión. Esta era Sofia Hellqvist, entonces conocida por posar con poca ropa en un reality de Suecia. Cuando el bombazo de la nueva relación se hizo público, todo estalló por los aires, recibiendo Sofi un odio brutal a través de las redes sociales. El pasado de Sofía no gustaba en absoluto a muchos ciudadanos, pero tampoco a la familia real de Suecia, que le hizo las mil y una para apartarla de la corona.
Harta del desprestigio al que se sometía constantemente por parte de las hermanas del príncipe, Sofía decidió hablar con su novio y darle un ultimátum. No había sido invitada al bautizo de su sobrina Estela. O la monarquía sueca rectificaba y la invitaba o ella rompía con él. La crítica situación hizo que Carlos Felipe hablara con su padre y lo convenciera para que Sofi acudiera al bautizo. Allí se salvaron los muebles, pero todo volvió a saltar por los aires con la boda de Magdalena de Suecia. Carlos Felipe quería que Sofía fuera una de las damas de honor y su hermana se negaba, por lo que esta decidió suprimir todas las damas de honor de su paso por el altar con Chris O'Neill. Otro escollo salvado que sentó como una patada en el culo dentro de la Casa Real, la cual esperaba ansiosa la ruptura del príncipe con su aún novia.
Pero de novia pasó a esposa. En 2015, Carlos Felipe y Sofía de Suecia unieron sus vidas para los tiempos de los tiempos y se convirtieron en marido y mujer en una de las bodas más románticas que se recuerda. Antes, por eso, desde según qué estamentos se intentó de todas todas que esta boda no se produjera. Algunos medios interesados alertaban de que la Casa Real había retenido fotografías obscenas de Sofía del mercado, cosa que nunca ocurrió. También Sofía recibió odio de parte de trolls y haters en redes sociales, que la tachaban como "la stripper de palacio". No obstante, nada de eso pudo con su boda con Carlos Felipe y, después de esta, Sofía se sinceró. La ya oficialmente princesa de Suecia declaró lo que sufrió en redes, empatizando así con los más jóvenes. Meses después, tras la luna de miel, los príncipes pusieron en marcha un proyecto con el fin de promover la vida online segura. Fue todo un éxito, demostrando así que Sofía era una buena persona. Ahora, tras la pandemia, se ha sabido que la princesa Sofía fue la única miembro de la Casa Real sueca que acudió como voluntaria a los hospitales para luchar contra el coronavirus. Bravo.
