Tamara Falcó se encuentra profundamente enamorada de Íñigo Onieva, considerándolo el amor de su vida y la persona con la que anhela construir una familia. Este deseo se presenta como la culminación necesaria para que su vida sea perfecta. Recientemente, la pareja se mudó a su nuevo hogar tras finalizar las reformas. A pesar de sus esfuerzos por concebir durante su extensa luna de miel, el tan ansiado embarazo aún no ha llegado. La marquesa de Griñón confirma que, a pesar de varios intentos, no está embarazada y reconoce que, dada su edad, superando los cuarenta, la posibilidad se complica.
Tamara ha optado por encauzar sus esfuerzos de manera natural y aún no ha recurrido a tratamientos de fertilidad convencionales. Ha puesto su confianza en la naprotecnología, un método natural que aborda las posibles causas de la infertilidad tanto en el hombre como en la mujer. Este tratamiento implica el estudio y seguimiento del ciclo de fertilidad de la pareja. La elección de Tamara por este enfoque busca realizar su deseo de ser madre de manera natural, alejándose de las técnicas de reproducción asistida. Descubrió la naprotecnología a través de una amiga que lamentó no haberla conocido antes de casarse.
A pesar de la lentitud de este proceso, Tamara inició el tratamiento unos meses antes de su matrimonio con Íñigo, destacando sus claras intenciones de ser madre cuanto antes.
Tamara Falcó no siente presión por quedarse embarazada
En cuanto a la perspectiva de la paternidad, Tamara y Íñigo no sienten una presión inminente. "Cuando estas solo te preguntan 'cuándo vas a tener novio', cuando tienes novio te preguntan 'cuando os casáis' y ahora lo que toca el niño. No tengo presión. Voy bastante a mi bola. Depende de Dios. Tengo plena confianza, si viene fenomenal y también conozco muchos matrimonios felices sin niños...", declaraba con la naturalidad que le caracteriza.
La pareja adopta una actitud relajada, confiando en que el momento adecuado llegará. Aunque la maternidad es un deseo, han considerado la posibilidad de no tener hijos, una opción que no les preocupa. Además, aunque la adopción es una opción que no han discutido en detalle, no la descartan. Tamara expresa que mantienen la ilusión de formar una familia, disfrutando del momento presente como pareja feliz, viajando y viviendo con calma y felicidad. "Seguimos con la ilusión de formar una familia. Es un momento super bonito para vivir en pareja. Hace muy pocos meses que nos casamos y hemos estado viajando mucho (...) Tenemos esa ilusión pero con la calma porque estamos juntos y felices", contaba.