Las historias sobre la vida de Letizia parecen ser innumerables. Ha estado en el centro de muchas controversias por su pasado. Lo más sorprendente es que todavía hay grandes vivencias que pretenden pasar desapercibidas de esos años de juventud. Como el tiempo de carencias y penurias que, junto a su hermana Telma Ortiz, la obligó a pedir dinero a sus amigos. ¿Por qué? El patriarca se gastaba el dinero en mujeres. Te contamos.
Jesús Ortiz —padre de Telma Ortiz y Letizia— es uno de los personajes más enigmáticos de la familia de la reina. Aunque hemos descubierto algunas pistas de cómo habría sido su vida entonces. En la biografía no autorizada que publicó David Rocasolano, se revelan aspectos sorprendentes sobre estos temas. Entre ellos, la difícil situación económica que llegaron a atravesar los Ortiz Rocasolano. Una familia que no tenía ingresos suficientes para comer apropiadamente y menos para costear la calefacción.
Telma y Letizia pasaban penurias, tenían que pedirle dinero a sus amigos para poder solventar y llevar una vida relativamente normal en su juventud. David narraba en su libro que, al llegar a su casa y de cualquier conocido, sus primas iban directo a buscar comida en la nevera. De esto era responsable Jesús, a quien se le describe como una persona viciosa y con las prioridades desviadas. Sigue leyendo para conocer el resto de detalles.
Las decisiones de Jesús Ortiz que afectaron la estabilidad de Telma Ortiz y Letizia
El peor escenario lo vivieron las hermanas Ortiz en sus primeros años. Una serie de privaciones que pudieron dejar atrás a medida que se fueron independizando. Pero la relación de sus padres fue otro de los problemas que tuvieron que soportar por bastante tiempo, hasta que fue insostenible. Cuando la familia se mudó a Madrid, empezaron a tener mayores discrepancias. Paloma no se sentía valorada ni apoyada por su esposo.
Hasta que la pareja se divorció, lo que iba a pasar de cualquier manera. El patriarca tenía una relación extramatrimonial con Ana Togores. Una joven de la edad de Letizia, también periodista, y en quien habría encontrado finalmente a una compañera. Sin embargo, Ortiz tuvo varias ‘amigas especiales’ a quienes sí les dedicaba su atención y buena parte de sus ingresos. Los informantes sugieren que hasta exhibía vínculos con la hermana de su mujer. Dicen que tenían una relación cercana que con el tiempo empezó a despertar suspicacias.
Maica Vasco, la periodista, dijo que él era “infiel por naturaleza” y que se citaba con su cuñada cuando tenía oportunidad. Hacían viajes y era en esas salidas que se gastaba el dinero que debía destinar al presupuesto familiar, de ahí que no tuvieran ni para comer apropiadamente. Además de otros encuentros furtivos con distintas mujeres sin identificar, lo que básicamente constituía las andanzas regulares del periodista.
Así fue como Telma Ortiz y Letizia crecieron. En un entorno familiar desfavorecido por la mala administración del dinero, problemas entre sus figuras paternas y la incredulidad de sus conocidos al ver el estado de descuido que presentaban. Pero la vida les dio un giro completo, el resto es historia.