Estos últimos meses han sido demasiado complicados para Letizia. La monarca se ha visto entre la espada y la pared con unas fuertes declaraciones de Jaime del Burgo donde asegura que fue infiel a Felipe VI con él durante varios años. Es más, recientemente ha confesado que el rey sería el amante en toda esta historia, porque el abogado siempre mantuvo una relación con la asturiana. Se ha dado a entender que existiría un pacto de confidencialidad firmado por los tres y que el matrimonio entre Felipe y Letizia sería puramente de conveniencia. La reina quiso convertirse en la mujer más poderosa de España, era su mayor afán. De hecho, los que trabajaron con ella en TVE aseguran que si el entonces príncipe no se hubiese cruzado en su camino hubiese acabado como directora de informativos o de TVE.
Letizia es una mujer muy controladora, fría y calculadora, así la describen los que la conocen bien. Por este motivo, esta información, cierta o falsa, ha hecho que pierda el control. No le ha quedado más remedio que aceptar el papel de reina consorte, como Sofía con Juan Carlos. Sin embargo, en casa aún tiene poder de decisión porque con Leonor y Sofía se mantiene firme, las ha alejado completamente del apellido Borbón. Esa fue su venganza por no haberla querido nunca en la corona por el simple hecho de ser una plebeya, pero a día de hoy alguien podría haberse vengado de ella.
Letizia nunca imaginó que algún día se convertiría en reina. Ni siquiera se le pasó por la cabeza que podría casarse con el entonces príncipe. De hecho, durante su estancia en México, sus amigas de aquella época revelan que era muy crítica con la monarquía, incluido Felipe, quien no era su tipo de hombre. Estas declaraciones sugieren que la madre de Leonor y Sofía pudo haberse casado por interés y ambición de convertirse en la mujer más poderosa de España.
Felipe y Juan Carlos tuvieron que borrar un sinfín de pruebas de Letizia
Muchas personas han tratado de desprestigiar la imagen de Letizia. Antiguas parejas, relaciones ocasionales, amigas, compañeros de trabajo e incluso familiares, como su primo David Rocasolano, han intentado aprovecharse revelando aspectos de su pasado, algunos de ellos incluso inventados.
En una biografía no oficial vendida en México se desveló que Letizia pudo haber sufrido un chantaje sexual para entrar a trabajar en TVE. La periodista Pilar Eyre subrayó al respecto que estuvo a punto de denunciarlo, pero que pese a todo acabó fichando por la Corporación Pública. Zepeda puntualizó al respecto que "me contó indignada que un periodista muy conocido que la había entrevistado para entrar en TVE le había pedido sexo a cambio de enchufarla. ¡Estuvo a punto de denunciarlo!’ Sé el nombre de este colega/canalla pero me lo callo”.
Según Enrique de Diego, también tuvieron que deshacerse de una noche de fiesta de Letizia mientras cubría para TVE la guerra en Irak. “De su viaje a Irak, el cortesano Federico Trillo hubo de destruir el informe de la sargento 'Paquita' sobre la noche de farra de Letizia con un mando de la Royal Navy”. Este vídeo habría costado a la corporación un millón de euros para su destrucción. Juan Carlos pidió el favor.