Pocas personas hay en el mundo de las celebrities y los royals españoles con la jeta y la poca vergüenza de Iñaki Urdangarin. El ex duque "em-palma-do", como él mismo se hacía llamar, es de aquellos que van por la vida con un "sí, pero no". O de los que se hacen los íntegros con la boca grande y con la pequeña, quieren continuar chupando del bote. Así, también nos hacemos nosotros los íntegros. El todavía marido de la infanta Cristina, desde que se separó de la hermana del rey, ha querido continuar con sus privilegios después de muchos años formando parte de la familia de los Borbones. ¿Cómo? Por ejemplo, yendo a la casita de Baqueira gestionada por la Casa Real, a pasar unos días de vacaciones para esquiar, no con Cristina, sino con su nueva pareja, Ainhoa Armentia.
Pero no es el único gesto de Iñaki que lo define como caradura. Según los informes, se espera que él y la infanta Cristina firmen los papeles del divorcio a partir del próximo 5 de junio, que es precisamente el día en que su hija pequeña, Irene Urdangarin, cumplirá 18 años. Eso les permitiría resolver su situación ante un notario, evitando el juzgado y posibles filtraciones de información. Pero Urdangarin piensa morir matando, o lo que es lo mismo, asegurarse una paguita generosa por su firma. Un acuerdo que se basa en las peticiones del exjugador de balonmano a la familia real, que ascienden hasta los 25.000 euros mensuales y dos millones de euros en concepto de indemnización. Este último cubriría el rechazo de Iñaki de publicar unas memorias en las cuales revelaría muchos secretos de la monarquía por los cuales ha recibido una oferta millonaria, cosa que hace temblar a Zarzuela.
Ahora, sin embargo, se ha sabido otra información sobre Urdangarin que deja muy claro qué tipo de personaje es, una sanguijuela. Porque el programa Fiesta de Telecinco ha hecho saber este fin de semana una exclusiva que demuestra que tiene muy poca vergüenza y mucha jeta... Y en Zarzuela, ir mirando hacia otro lado. Resulta que las investigaciones del programa de Emma García han demostrado que Iñaki Urdangarin sigue teniendo escoltas de la Casa Real más de un mes después de que se iniciaran los trámites para que se la retiraran. Han recordado unas imágenes recientes de Urdangarin paseando con su madre y rechazando hacer declaraciones delante de las cámaras mientras de fondo se escucha una voz grave pidiendo los papeles al periodista.
"Esa voz que se escucha pidiéndole la documentación al reportero que pregunta al ex duque de Palma, pertenece al nutrido grupo de agentes del cuerpo nacional de policía pertenecientes al grupo de Casa Real que aún tiene a su servicio". Según el programa, "nos llama la atención que Iñaki siga contando con este servicio pese a que el ministerio inició ya el proceso de retirada de escolta de Urdangarín, aunque según informan fuentes de Interior, se están encontrando con problemas para llevarlo a cabo". ¿Por qué?: porque "parece ser que es el mismo Iñaki quién se niega a que se le retire la seguridad privada". Iñaki, disfrutando de un privilegio pagado con dinero público, que tiene un coste, atención, de 8.000 euros al mes. Ahí es nada.
Pero ya se puede ir dando con dos piedras, que desde Fiesta apuntan que cuando firme el divorcio, ya puede pedir la luna que se quedará sin escoltas pagados por Casa Real... ¿Quizás por eso está alaargando tanto el día de firmar los papeles?