El pasado 3 de febrero se dio a conocer una noticia sobre la casa real de Italia. Concretamente, el fallecimiento de Víctor Manuel de Saboya, hijo de Humberto II, el último rey de Italia. Perdió la vida a los 86 años, en Ginebra, donde la familia estaba exiliada desde la posguerra. A las 7:05 de esta mañana, falleció con serenidad, rodeado de su familia, su alteza real Víctor Manuel", publicó la familia.

Víctor Manuel de Saboya era famoso por muchos de sus escándalos. Especialmente el que le implicó en el asesinato a tiros de Dirk Hamer, un joven estudiante alemán de 19 años, por tratar de robar un bote inflable de la familia. Ocurrió en agosto de 1978. Un episodio del que se pueden conocer muchos detalles en la serie documental ‘El príncipe que nunca reinó’, dirigido por Beatrice Borromeo, la mujer de Pierre Casiraghi, y que se puede recuperar en Netflix.

Víctor Manuel de Saboya reveló cómo Juan Carlos mató a su hermano Alfonso

Un contenido de la plataforma de vídeo bajo demanda en el que, además del caso principal, destacan unas declaraciones que se pueden escuchar al final del último capítulo, cuando Víctor Manuel cree que ya nadie está grabando. Mientras abre una botella de champán, se refiere a la muerte del hermano del rey emérito Juan Carlos I, a quien conoció cuando estaban exiliados.

victor manuel saboya
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“Era muy poco educado con mi mujer y conmigo cuando teníamos desencuentros. Y no sé por qué, porque siempre fuimos muy amables, y él lo sabía”, empieza Víctor Manuel, antes de entrar en materia. “¡Yo estaba allí! Estábamos en el exilio y solíamos dispararles a tarros y botellas en la playa de Cascais”, añade el protagonista. “Juanito la armó gorda. Le disparó a su hermano y lo mató. Se llamaba Alfonsito. No le disparó directamente, sino a través de un armario. Yo estaba allí. Fue un accidente. Al 100%, ¿eh? Escondí mi arma inmediatamente. Si no, me habrían vuelto a culpar", revela el ‘príncipe que nunca reinó’. Y concluye: “Después de eso, lo llamó Franco. Franco dijo: lo convertiré en rey”. Parece que al generalísimo le gustó esa faceta y ese amor por las armas (y el poder) del que posteriormente sería el rey de España.