Irene Urdangarin tenía pensado estudiar en la École hôtelière de Lausanne, una escuela mundialmente famosa para la cocina y la hostelería. La hija de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina, sin embargo, al final decidió dejar eso en pausa y optar por un plan más relajado.
Según lo que cuenta la revista ¡HOLA!, la joven quiere cogerse un "año sabático", recorrer el mundo y hacer lo que le plazca cuando le plazca. "Irene ha decidido tomarse un año sabático, antes de empezar la universidad porque quiere, al igual que su hermano mayor, Juan, trabajar como voluntaria y formar parte de un proyecto de cooperación. Se dedicará a explorar mundo y pensar bien lo que quiere hacer, para definir lo mejor posible su futuro. La carrera de hostelería ha quedado descartada", reveló la revista del corazón.
Al parecer, Irene está pasándolo mal después de lo que ha vivido en estos últimos años. Su padre en la cárcel, su madre en el banquillo de los acusados por el caso Nóos, la infidelidad de su padre a Cristina y el posterior divorcio, el mal ambiente entre sus padres y la familia real... Todo esto ha dejado huella en Irene. De hecho, los problemas en los estudios ya empezaron el año pasado mientras cursaba bachillerato.
Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina obligan a Irene a sacarse el carnet de conducir
Este episodio ha sido una desilusión para sus padres. Cristina e Iñaki estaban tranquilos, ya que sus cuatro hijos ya estaban encaminados. Además, a Irene le costó conseguir plaza en el centro. Incluso tuvo que improvisar unas prácticas de dos semanas para cumplir con los requisitos del centro para entrar. Y tras tanto esfuerzo, la hermana del rey Felipe VI y su todavía marido estaban muy satisfechos. Pero Irene ha roto esa ilusión.
Eso sí: Iñaki y Cristina le han dicho que de año sabático nada de nada. Por lo menos debe hacer algo. Y según informa Vanitatis, ha decidido apuntarse a la autoescuela para sacarse el carnet de conducir. Se había estudiado la posibilidad de que se lo sacara en Suiza, pero se descartó esta posibilidad, ya que el carnet de Suiza no es válido en España y viceversa. Y es por eso que finalmente se ha apuntado a una autoescuela de Móstoles. Y mientras realiza el curso se instalará en la Zarzuela. Está por ver si, como en otras ocasiones con miembros de la monarquía, algunos profesores se desplazan a palacio para realizar las prácticas.
Irene, sí; Victoria Federica, no
Sea como sea, este asunto no ha pasado desapercibido para la otra hermana del rey, la infanta Elena, y para su marido. Y mucho menos para Victoria Federica. Se confirman las sospechas de la hermana de Froilán de que ninguno de estos dos primos de Leonor y Sofía son bienvenidos en la Zarzuela. Y es que si a Irene le permiten entrar en la Zarzuela, a Victoria ya la expulsaron de ella hace tiempo.
Se conoce que Victoria usaba las instalaciones de los reyes para pasar sus resacas después de noches de fiesta. Vic cogía un taxi y se dirigía a la Zarzuela, donde el personal de la casa real le esperaba en la puerta. Allí pernoctaba y desayunaba, como si fuera su Bed&Breakfast particular. Una costumbre que Letizia cortó de cuajo, prohibiéndole que siguiera realizando esas prácticas. Si quería dormir la mona tendría que hacerlo en otro sitio. Zarzuela no es un techo para borrachos.