La infanta Elena ha preferido siempre mantenerse en un discreto segundo plano, evitando la atención pública a pesar de su estatus como una de las figuras más conocidas del país. Es, sin duda, la más fiel representante de la familia Borbón y comprende bien su rol, evitando sobrepasar los límites impuestos. Sin embargo, sus hijos, Froilán y Victoria Federica, han complicado su situación dentro de la Casa Real debido a los escándalos en los que se han visto envueltos. En particular, Froilán fue enviado a Abu Dabi para mitigar la polémica que lo rodea. Si no fuera por estas circunstancias, la infanta Elena habría estado lejos de las portadas desde su divorcio de Jaime de Marichalar, cuando se especuló sobre una posible nueva relación. Una foto de la infanta esquiando con otro hombre generó rumores, pero en realidad, solo se trataba de una conversación y no de un romance, como algunos sugirieron.

infanta elena llorando
infanta elena llorando

Desde que se separó de Jaime de Marichalar hace casi veinte años, Elena de Borbón no ha formalizado ninguna relación amorosa, al igual que su exmarido. Ha llevado una vida soltera, dedicada a sus hijos y su mascota. Aunque ha tenido encuentros con otros hombres, ninguna de esas relaciones ha llegado a consolidarse. En los últimos años, se la ha relacionado con figuras como Ángel Villamor, el traumatólogo del rey Juan Carlos; Carlos Ruiz Velasco, monitor de esquí de sus hijos, con quien fue fotografiada en una situación que parecía un beso, pero solo era una conversación cercana; Fernando Garrido, su jefe, con quien mantiene una estrecha amistad a pesar de los rumores; y Luis Astolfi, un amigo cercano, considerado por muchos como el gran amor de su vida, con quien se cree que tuvo una relación en 1984.

La prensa especializada señala que el romance con Luis Astolfi duró aproximadamente dos años, aunque nunca fue confirmado oficialmente y no existen pruebas concluyentes. Algo similar ocurrió con otro de sus romances más discretos. En sus memorias, Cayetano Martínez de Irujo reveló que tuvo una breve pero intensa relación con Elena de Borbón que duró tres meses.

La infanta Elena ha tenido amigos especiales, pero ninguna relación seria 

"Fue una situación especial. A ella no le agradó mucho que lo mencionara en el libro. Fue algo muy oculto y secreto. La infanta es una persona maravillosa, la conocía del ambiente hípico, pero en tres meses me di cuenta de que no estaba preparado para pasar de una vida tan estructurada como la mía a otra aún más restrictiva. No me veía en ese entorno. Mi nana fue la única que lo entendió y me dijo: ‘hijo, no naciste para ser un segundón'", confesó Cayetano Martínez de Irujo.

"La única que se mantuvo imparcial fue mi hermana Eugenia, pero todos los demás me empujaban en esa dirección. Fue difícil salir de ahí. Era muy atractivo para todos a mi alrededor. Pero tuve la fuerza de decir 'esto no es para mí'. Sabía lo que quería, incluso en medio de mi confusión. Siempre he tenido un carácter fuerte, en eso me parezco a mi madre", comentó Cayetano Martínez de Irujo a Risto Mejide. Fue entonces cuando la infanta Elena conoció a Jaime de Marichalar.

Luis Astolfi y la infanta elena
Luis Astolfi y la infanta elena

Actualmente, parece que la infanta Elena no tiene interés en comenzar una nueva relación. Ha encontrado comodidad en su vida solitaria y, según confiesa a sus amigos más cercanos, se siente mejor que nunca en esta etapa de su vida.

Victoria Federica y Froilán no han conocido a ningún amigo especial de la infanta Elena, no quiere ninguna relación seria, pero parece que se rodea de muy buenos amigos especiales. Algunos dormirían alguna noche con ella en casa, justo en el momento en que está la influencer, que vive con ella, y ya que la relación no es muy buena, en esos momentos menos. Victoria Federica no quiere a ninguno de los amigos de su madre. No le gusta verla con ningún otro hombre que no sea Jaime de Marichalar, se ha acostumbrado así y así quiere que continúe siendo.