Tal y como te contábamos hace unos días, Victoria Federica, hija de la infanta Elena y Jaime de Marichalar, cambió las procesiones de Semana Santa por el sol y el calor de Cancún. La joven de 22, a la que ya hemos visto en Ibiza o en Marbella, se fue a la costa mexicana para disfrutar de unos días de relax. Y allí sigue, desde donde cuelga instantáneas en Instagram mostrando a sus seguidores los escenarios paradisíacos que está visitando.

Un viaje que ha hecho junto a su íntima amiga Rocío Laffón, junto a la que ha podido ir de fiesta, tomar el sol en la playa o tomarse unos mojitos. De hecho, Laffón es quien ha ejercido de fotógrafa para las tomar las instantáneas que sube a su muro de la red social. Unas fotos en las que, por cierto, hace algunas trampas.

Victoria Federica tira de la versión low cost del Photoshop

Tal y como se puede comprobar en las imágenes, Victoria Federica mete tripa para lucir un tipo esbelto y perfilado, libre de michelines y celulitis. Ni que le hiciera falta, teniendo en cuenta que Victoria ha heredado los rasgos físicos de su padre, Jaime de Marichalar, que destaca por su aspecto alto y delgado. A diferencia de otras influencers, Victoria Federica prefiere renunciar al Photoshop. Aunque lo cierto es que no queda natural en absoluto y marcar el costillar genera más preocupación que expectación.

Victoria Federica Instagram
Victoria Federica Instagram

Vic ha estado visitando lugares emblemáticos de la zona, como el yacimiento de Chichén Itzá, el cenote Yalahau i la Isla Mujeres. Y todo ello alojándose en los resorts más lujosos con enormes piscinas y vistas al mar de ensueño.

Así luce Victoria Federica cuando no mete tripa en Instagram

¿Rumbo a Los Ángeles?

Mientras tanto, apunta Informalia que el próximo destino de la nieta de Juan Carlos I podría estar en Los Ángeles, California. Pero no por gusto. Según el medio mencionado, la infanta Elena estaría pensando en repetir la operación Froilán, a quien ha enviado a Abu Dabi para alejarlo de los focos de la prensa y las polémicas. “La infanta Elena valora enviar a su hija a la ciudad Californiana, donde establecer nuevas amistades y rutinas más calmadas”, escribe el digital.