La historia de Froilán y Victoria Federica ha sido una constante fuente de preocupación para la infanta Elena. Los hijos de la hermana del rey Felipe VI han sido protagonistas de numerosos incidentes que han generado críticas y titulares negativos para la Casa Real. Desde enfrentamientos con la policía hasta fiestas ilegales, su comportamiento ha colmado la paciencia de la familia real.
En el caso de Froilán, las medidas tomadas fueron serias. Después de un incidente que involucró una pelea con arma blanca y su participación en un after ilegal, fue enviado a Abu Dabi junto al rey emérito Juan Carlos I. Sin embargo, con Victoria Federica la situación es diferente y más complicada.
Preocupación por los comportamientos de Victoria Federica
La relación entre la infanta Elena y su hija Victoria Federica ha sufrido un notable distanciamiento. Las últimas polémicas han aumentado la tensión entre ambas, y a pesar de compartir hogar, su comunicación es mínima. La preocupación de la infanta Elena se acentuó al ver que su hija decidió pasar de estudiar para incursionar en el mundo de las redes sociales y vivir de ser influencer involucrada en fiestas y eventos constantes.
La infanta Elena teme que la sobreexposición de Victoria Federica pueda afectar la imagen de la joven. Mientras que en la familia real están preocupados por que ello pueda afectar a la imagen de la monarquía. La joven ha concedido entrevistas y ha revelado detalles sobre su vida familiar, exponiendo aún más a la corona. Además, la influencia de su padre, Jaime de Marichalar, en su carrera artística, preocupa aún más a la infanta Elena.
Victoria Federica ha intentado dejar de fumar en dos ocasiones
La joven comparte ciertos vicios con su padre, lo que genera aún más preocupación en la infanta. Por ejemplo, el del tabaco. El intento de la infanta Elena por alejar a su hija de los cigarrillos ha sido un desafío. A pesar de haber financiado tratamientos médicos en dos ocasiones para ayudarla a dejar de fumar, Victoria Federica ha vuelto a fracasar en su segundo intento.
La lucha de la infanta Elena por el bienestar y la buena imagen de su hija parece no tener fin. La distancia entre ambas y los problemas constantes de Victoria Federica son motivo de preocupación no solo para la familia real, sino también para la propia infanta. La esperanza de ver a su hija superar estas dificultades sigue siendo una prioridad para ella.