Victoria Federica es una de las personas del círculo de la familia real que más ha dado de qué hablar en las últimas semanas. El motivo no es otro que su viaje a México. La hija de la infanta Elena y Jaime de Marichalar puso el sol de Cancún por delante de las procesiones de Semana Santa o de visitar a su abuelo Juan Carlos y a su hermano Froilán. Mientras su madre acudió a Abu Dabi y se fotografió con su hijo y con su padre, Victoria se tomaba otro tipo de fotos posando en bikini y presumiendo de tipo.
Este desmarque de Victoria Federica no ha gustado nada a la infanta Elena, que hace semanas que se plantea enviar a la joven al país de Oriente Medio con el rey emérito tal y como ha hecho con su hermano. Sus intenciones pasan por alejarla de las juergas que se pega en Madrid, así como no tener que pagar impuestos en España cuando le toque recibir la herencia del emérito. Por el bien de la familia lo que hay detrás de la operación de que se vaya es el hecho de que pueda recibir una donación del abuelo y la Hacienda pública no se enteraría de nada porque su residencia fiscal estaría allí, como es ya la de Froilán. Se hace una donación y no nos enteramos de nada", comentó Juan Luis Galiacho el pasado fin de semana.
Victoria Federica pasa por el cirujano plástico
Y mientras la infanta Elena valora la situación, Victoria sigue adelante con su proyecto de convertirse en influencer. Actualmente acumula más de 238.000 seguidores en Instagram. Pero no solo imita a la mayoría de influencers de referencia subiendo fotos a la red social. En los últimos tiempos también se ha sometido a algunos retoques estéticos, siguiendo los pasos de la más influencer de la familia real: la reina Letizia.
Según explicó el experto en cirugía estética Paco Nieto para la revista Mujer Hoy, Victoria se habría rellenado los labios con ácido hialurónico. “Con un vial de ácido hialurónico y en una sola sesión, se dará a tus labios la forma y volumen deseados. Es un tratamiento rápido realizado de la mano de un médico estético que te aconseja sobre el volumen adecuado”, comenta el especialista.
Asimismo, Daniel Zarza, de Harmos Clinic, habla de un alzamiento de cejas. Una técnica conocida popularmente como foxy eye que se realiza con un hilo tensor o con toxina botulínica. Y también se habría retocado los pómulos. “Creo que se ha podido hacer un remodelado del óvalo facial, al aumentar los ángulos de mandíbula y proyectar el mentón con ácido hialurónico”, señala Zarza.