Juan Carlos I quiso borrar el expediente de Letizia cuando supo que se casaría con Felipe VI y todas sus armas para acabar con la relación no funcionaron. La reina nunca pensó que heredaría el trono, así que vivió su juventud como cualquier otra persona anónima, y toda esa información le ha salpicado durante estas dos décadas.
La monarca se casó enamorada de Felipe VI, aunque hay muchos que piensan que fue por ambición, era un plan que ella había urdido desde hace años, por ello estudió periodismo, para cruzarse en algún momento con el entonces príncipe. Ya pensaba en él cuando se casó con Alonso Guerrero, la primera pareja oficial de la asturiana, y es que le conoció en su escuela, mientras estudiaba bachillerato, y no precisamente porque fuese su compañero de pupitre, sino su profesor de instituto. Empezaron a salir juntos cuando ella tan solo tenía 17 años, y en la escuela fue un escándalo. Él era diez años mayor que ella. Se casaron en 1998 y tan solo un año después decidieron separarse, un matrimonio que no iba a funcionar porque ya vivieron varias crisis cuando Letizia se fue a México.
Alonso Guerrero mantiene relación con la corona
Alonso Guerrero siempre ha sido un apasionado de la literatura, y nunca ha abandonado su pasión. En 2023 publicó su última novela, ‘Las mujeres felices son una quimera’, un título con el que generó controversia porque muchos pensaron que hacía referencia a su relación con la monarca, algo que él mismo negó para defender su obra.
El escritor rehizo su vida y se instaló en Guadalajara. Mantuvo una relación con María del Carmen Astero Marín, también profesora y de quien se acabó separando.
Según informaciones de El Mundo, tras su divorcio con Letizia, se refugió en su piso de dos plantas en el centro de la ciudad, intentando mantener su rutina, alejado del foco mediático.
También recuperó las clases en el mismo centro académico en el que conoció a Letizia. Posteriormente pidió un traslado a otro centro en Madrid. Siempre ha sido una persona muy reservada y nunca ha querido lucrarse de su relación con la actual reina. Se cree que Alonso Guerrero se vería a escondidas con Felipe VI para facilitarle una serie de pagos por su silencio.
El propio Alonso Guerrero desmintió esas informaciones y asegura que mantiene una relación cordial con los reyes.
A día de hoy lleva una vida normal y ya nadie le conoce por ser el ex de Letizia. Han pasado muchos años de aquella historia de amor que parece olvidada.