Leonor llegó el pasado jueves en Perú, el cuarto país que visita a bordo del buque escuela Juan Sebastián Elcano, un día antes de la previsión. Estuvo fondeando frente a la Escuela Naval de Perú hasta que atracó esta misma mañana en el puerto de Lima. La princesa tendrá otro merecido descanso hasta el día 22 de abril, cuando volverá a poner rumbo a Panamá. Nuevamente las cámaras y los ciudadanos anónimos han estado pendientes de los guardiamarinas, fundamentalmente de la pasajera de excepción, la hija de Letizia y Felipe VI. Los altos cargos ya han comunicado a los monarcas que han llegado bien, aunque ha sido un día con alguna penalización.
Al llegar, el barco disparó una salva de 21 cañonazos al acercarse a la península e La Punta, donde se encuentra la Escuela Naval peruana. Desde tierra les respondieron con otra salva como símbolo de bienvenida y respeto.
Leonor pasa una de las peores noches, malestar general
Hace unos días Casa Real concedió otras imágenes y vídeos de las instrucciones que recibe y maniobras que realiza Leonor con sus compañeros a bordo del buque escuela. La princesa ha superado más de la mitad del trayecto, aunque no regresará a España hasta mediados del mes de julio. "El interés por la figura de la heredera al trono es notorio en América Latina, especialmente en países con vínculos históricos como Perú", comentó una fuente del Ministerio de Exteriores español. “Esta travesía es, para la princesa Leonor, un paso más en su preparación como jefa del Estado. Pero también es un gesto de cercanía hacia las naciones hermanas de América", subrayaron desde la Casa Real.
Leonor no podrá realizar algunas actividades con sus compañeros. La princesa no ha mostrado su mejor cara en esta nueva aparición. Ha pasado una noche de viernes Santo muy complicada. No se encontraba bien debido al frío y a la mala mar del día anterior con olas de hasta cinco metros. Fue un final de travesía complicado. Sufrió mareos y volvió a vomitar provocando un malestar general.
Por prescripción médica se apartó a la princesa de las maniobras en el barco para que pudiese descansar y recuperarse, mientras que tampoco se espera que salga de su camarote más allá del saludo y para que puedan hacerle fotografías y no disparen falsos rumores. Fuentes cercanas al equipo médico de Elcano han asegurado que se encuentra bien ha sido solo un malestar general como le podría pasar a cualquier otro compañero, de hecho no es la única, aunque ella sea la protagonista por su calidad de futura reina de España.
