Ya hace unos cuantos meses que Juan Carlos I huyó con la cola entre las piernas hacia su retiro dorado de Abu Dhabi.
Ahora que los palmeros habituales del reino preparan el terreno para un posible retorno oficial del monarca en España, ahora que vuelve a sonar el rumor con que el campechano pueda volver a pesar de los escándalos y tomarle el pelo a los ciudadanos, algún medio ha considerado oportuno repasar los viajes que ha hecho al país donde hasta no hace mucho, iba arriba y abajo haciendo gala de su socarronería y su barra infinita, aprovechando que se le perdonaba todo para hacer lo que le salía del moño, poniéndose como el Kiko en diferentes festines, quedando con amantes y una larga lista de hechos reprobables que todo el mundo escondía bajo la alfombra.
El borbón ahora se considera un apestado, que está harto de estar en lo que él considera un exilio y bla, bla, bla, y culpa a su hijo de que lo tengan retenido en los Emiratos Árabes sin poder volver a su país. Dicen sus próximos que está triste y que quiere volver ya a España. Pero de momento, ya veremos qué pasará y si la justicia española hará lo que tiene que hacer. No lo parece, sin embargo. Los poderes judiciales españoles tienen la palabra inviolabilidad del rey grabada a fuego en el frente.
El periodista Gustavo González ha recordado en el diario La Razón las últimas veces que Juancar ha cogido un avión y se ha presentado en España a pesar de la maleta llena de polémicas que lo rodean por todas partes, especialmente las que tienen que ver con su enriquecimiento a manos llenas en negocios turbios y paraísos fiscales.
Dicen que el emérito sufre en la distancia y que echa de menos el país, sus amigos, los veranos en Mallorca o las reuniones en Sanxenxo. "Solicitó viajar a España por la muerte de Carlos Falcó, Marqués de Griñón y le fue denegado el permiso, lo que le causó un gran disgusto". Pobrecito Juancar.
Explica González que el padre de Felipe "podría venir a mediados de este mes a pasar unos días, pero ya lo hizo en al menos tres ocasiones". ¿Cuáles? Dos de estos viajes fueron fruto de sendas revisiones médicas, una el otoño pasado, la otra esta primavera. ¿Y la tercera? "Por placer, el de estar con sus leales. Fue hace tan solo un mes en Madrid, tres días después de haber recibido la visita de las Infantas en Abu Dabi.".
Lo más jugoso, sin embargo, de lo que explica el periodista es que "Hay una cuarta visita que no está del todo constatada, este verano en Sansenxo, pero la presencia de miembros de la seguridad del Rey ofrecían pocas dudas de su visita a la localidad". El periodista habla de un círculo de amigos fieles que nunca lo abandonan, y destaca "una buena amiga que no es conocida. Siempre ha estado cuando le ha necesitado. La conoce hace tres décadas y nunca le ha fallado. Su leal amiga, con inmaculado nombre, le ha aconsejado, consolado y apoyado en sus peores momentos".
Más datos, "No se trata de ninguna amante. Esta mujer está casa y no tiene otra intención que la de de ayudar a Don Juan Carlos. Ha viajado en dos ocasiones a Abu Dabi para visitarle. Ahora es el Rey emérito el que tiene la intención de viajar a España en una fecha cercana al 15 de este mismo mes para permanecer en una finca de Ciudad Real unos días".
¿Cómo sería este retorno, para reencontrarse con su amiga misteriosa? "Viajaría, como en las otras ocasiones, en un jet privado facilitado por sus amigos saudíes y con su correspondiente equipo de seguridad". ¿Y dónde iría? "Estamos en temporada de caza, un deporte que él adora y las fincas de la llamada 'Milla de oro' permiten aterrizar sin hacer ruido, hay muchos aeródromos locales alrededor de las fincas y luego es tan sencillo como tomar desde allí un helicóptero o un coche". Muchos ya salivan y van preparando las cervicales para ir haciendo genuflexiones...