La Casa Real española se enfrenta a una nueva controversia interna que ha desencadenado una auténtica guerra familiar en torno a un tema delicado: el lugar de entierro del rey emérito Juan Carlos I. Mientras sus hijas, las infantas Elena y Cristina, insisten en que su padre debe descansar en el Panteón de los Reyes de El Escorial, donde están enterrados la mayoría de los monarcas españoles, el actual rey Felipe VI está recibiendo presiones para considerar alternativas, dado que no queda espacio disponible en dicho lugar.
¿La solución para el entierro de Juan Carlos I?
Las hijas del rey emérito se han mostrado firmes en su postura en contra de todo pronóstico, rechazando cualquier opción que no sea El Escorial como el último lugar de descanso para su padre, el rey emérito. Según fuentes cercanas a la familia, las infantas Elena y Cristina habrían propuesto que se realice una ampliación del Panteón para dar cabida a su padre, argumentando que le corresponde por derecho como rey que fue de España a pesar de la multitud de polémicas que tuvo durante su vida. Esta insistencia ha generado tensiones en Zarzuela, ya que no quieren ni oír hablar de otras alternativas.
Por otro lado, el rey Felipe VI ha recibido presiones desde varios sectores, incluyendo asesores y allegados, para que explore otras opciones más viables. Esto deja al rey en una posición complicada, ya que debe lidiar con las expectativas de su familia y el impacto que podría tener una decisión de este calibre en la imagen de la monarquía.
El propio Juan Carlos I ha dejado claro su deseo de ser enterrado en El Escorial, donde descansan la mayoría de los monarcas de la dinastía borbónica, y ha expresado su negativa a considerar cualquier otro lugar en consecuencia. Su determinación ha avivado aún más el conflicto, creando una especie de "guerra silenciosa" entre los miembros de la familia, lo cual se mezcla con otros conflictos que ha tenido la familia desde hace años.