Son momentos muy complicados para Leonor. La princesa creía que la travesía en el buque escuela Juan Sebastián Elcano iba a ser un viaje de ensueño, pero finalmente se ha convertido en un infierno. Juan Carlos y Felipe VI guardan un gran recuerdo de esta aventura, pero en su caso todo era distinto, mucho más cómodo. Nadie les robó su privacidad e intimidad. A día de hoy existen muchas formas de fotografiar a la princesa. Hasta una persona anónima tiene en su poder un móvil con cámara y redes sociales. Es fácil hacerle una fotografía y publicarla rápidamente. La hija de Letizia no puede esconderse de todo el mundo. Genera una gran expectación y los medios de comunicación están pendientes de cada uno de sus movimientos.
Leonor no se siente segura, tiene mucho miedo, y más que por ella por sus compañeros. Ellos son personas totalmente anónimas y a veces por el simple hecho de salir con ella les pone en el foco mediático, como al guardiamarina al que vincularon con la hermana de Sofía en Brasil. Esa fue la primera parte de este infierno mediático. Ni los escoltas son capaces de frenar tantas imágenes e información de la hija de Felipe VI en este viaje.
En Brasil acudió a una fiesta previa a carnaval en compañía de un compañero. Ambos bailaron y hablaron tranquilamente. Aseguran que demostraron una gran complicidad entre ellos. Se habla de un beso aunque nunca se vio en las imágenes. En Montevideo se la fotografió tomando el sol en bikini en una playa. Una imagen que ha dado la vuelta al mundo y se ha pagado por miles de euros. Finalmente la publicó una conocida revista española la semana pasada. Y por último se vivió la gota que colmó el vaso. Se difundieron unas imágenes de las cámaras de seguridad de un centro comercial vulnerando su privacidad e intimidad. Felipe VI y Letizia tomaron medidas drásticas y demandaron por primera vez.
Letizia está muy preocupada por la salud de su hija, pone profesionales a su alcance
Después de todos estos acontecimientos, Leonor no se siente segura y está muy triste. Se la vio cabizbaja y seria cuando llegó a Valparaíso. Ni una sola fotografía de estos días en Chile. Es evidente que la respuesta de Casa Real ha surtido efecto. Letizia tiene mucho miedo de que esto perjudique a la salud mental de su hija.
Letizia, comprometida con la salud mental, ha enviado de urgencia a un grupo de psicólogos al buque escuela Juan Sebastián Elcano para tratar a Leonor sobre estos episodios. No puede abandonar esta aventura y necesita recargarse de fuerzas.
