La vida de Letizia dio un giro de 180 grados cuando Felipe VI se enamoró de ella. Juan Carlos y Sofía no la vieron una buena elección y es que era una plebeya, divorciada de su profesor de instituto, a quien conoció con tal solo 17 años. El emérito había investigado a la asturiana y prohibió al príncipe mantener una relación con ella, y mucho menos casarse. Podría ser un gran problema para la monarquía española. Pero finalmente fue todo lo contrario.
Letizia vivió su juventud como cualquier persona de aquella edad, algo que nunca podrán hacer sus dos hijas, especialmente Leonor, futura heredera. Se casó con su profesor de instituto, se marchó a estudiar a México donde se ganó dinero vendiendo tabaco de contrabando. Salía de fiesta diariamente, aunque era muy aplicada. Hizo autostop en la Costa Brava, incluso nudismo en sus playas. Todo el mundo tiene información jugosa de la reina. Fue una labor muy intensa la que llevaron a cabo Juan Carlos y Felipe para eliminar todo el material comprometido.
Jaime del Burgo guarda material comprometido de Letizia
David Rocasolano publicó una biografía no autorizada con todos los episodios oscuros de la reina, y se hizo 100% responsable de lo que escribió, como los dos supuestos abortos que Felipe encubrió cuando los conoció. Letizia rompió cualquier tipo de relación con su primo. También con Jaime del Burgo, ex de Telma Ortiz, quien años antes se enamoró de la madre de Leonor y Sofía, incluso compró un anillo, pero ella no quiso casarse.
Jaime del Burgo guarda material de la reina muy comprometido en una caja fuerte. Así se lo ha contado a Jaime Peñafiel, íntimo amigo de Letizia, en su último libro. En calidad de abogado, Jaime del Burgo defendió los intereses de Letizia en la negociación de sus capitulaciones matrimoniales. Desvela en el libro de Jaime Peñafiel que el CNI registró su casa en busca de documentos comprometidos o relativos a Letizia, un material que él asegura tener guardado en una caja fuerte.
