La Casa Real ha experimentado un cambio significativo que ha alterado el equilibrio de poder en Zarzuela en los últimos meses. Con el objetivo de fortalecer su imagen y la de la futura heredera, la princesa Leonor, Felipe VI ha decidido tomar medidas drásticas que han afectado a algunas personas cercanas a la reina Letizia. Cuatro figuras clave en su entorno, incluyendo a su madre, Paloma Rocasolano, su pareja, Marcus Brandler, su hermana Telma Ortiz y su cuñado Robert Gavin, han sido prácticamente expulsados de la vida cotidiana en Zarzuela, lo que marca un nuevo rumbo en la dinámica familiar real.

Durante años, Paloma Rocasolano fue una presencia constante en Zarzuela, donde su cercanía con sus nietas, Leonor y Sofía, le otorgó un estatus especial. Era común verla por los pasillos del palacio e incluso contaba con habitaciones asignadas dentro de la residencia real. Sin embargo, su acceso irrestricto a las niñas generó incomodidad en la reina Sofía, quien se sintió limitada en su relación con sus nietas. Esta situación creó una tensión que fue creciendo a lo largo del tiempo, especialmente considerando que Paloma disfrutaba de una cercanía que algunos veían como un desafío a su autoridad.

paloma rocasolano y marcus brandler
Paloma Rocasolano y Marcus Brandler

La familia de la reina Letizia, daño colateral en la nueva estrategia de la Casa Real

Los privilegios de Paloma no se restringían únicamente a su presencia física. Utilizaba los servicios del palacio, como la lavandería para sus vestimentas y las de su pareja, Marcus. Además, era habitual que disfrutara de comidas en Zarzuela, e incluso en ocasiones se llevaba comida a su casa. Estos beneficios se extendían también a Telma Ortiz y su pareja, Robert Gavin, quienes mantenían una relación cercana con la realeza. Sin embargo, todo esto cambió tras el escándalo provocado por las revelaciones de Jaime del Burgo, quien hizo públicas ciertas intimidades sobre la vida de la familia real. Estas filtraciones afectaron directamente la influencia de Letizia en Zarzuela y dejaron a su círculo familiar en una situación vulnerable.

Ante esta situación, Felipe VI tomó la decisión de limitar el acceso de Paloma, Marcus, Telma y Robert al palacio, marcando así una clara distancia entre la realeza y el entorno de Letizia. Este pacto, sellado por el rey, busca reforzar su imagen y la de Leonor, al tiempo que pretende proyectar una sensación de reconciliación familiar.

Telma Ortiz Robert Gavin GTREES
Telma Ortiz Robert Gavin GTREES

Cambio de orden de poder en la familia real

Mientras tanto, las infantas Elena y Cristina, que habían estado alejadas del foco real, han recuperado protagonismo en la agenda pública y privada del rey, lo que muchos interpretan como parte de una estrategia para restaurar la unidad en la Casa Real, que se había visto deteriorada por los escándalos recientes.

El cambio en la dinámica familiar también implica un refuerzo en el peso de la reina emérita Sofía en la agenda institucional, quien parece retomar un rol más activo en la Casa Real. Esta reestructuración tiene como finalidad garantizar que el foco de atención se mantenga en los miembros más directos de la familia real, asegurando que la monarquía se presente ante el público como un bloque unido y estable.