En un giro inesperado de los acontecimientos, las negociaciones para el divorcio entre Felipe VI y Letizia han llegado a un punto muerto, según informaciones recientes. Zarzuela ha decidido romper las conversaciones debido a las exigencias consideradas inalcanzables por parte de la reina consorte, quien parece no estar dispuesta a aceptar los términos previamente acordados antes de su matrimonio.

Jaime del Burgo descubrió ante la prensa y las redes sociales que Letizia, supuestamente, le había sido infiel durante años a Felipe VI con él. Una serie de revelaciones que volvieron a traer a la conversación la crisis que afrontó la pareja real en 2012 y otros detalles escabrosos de su intimidad. Desde Zarzuela han intentado mitigar los daños, contrarrestar estas declaraciones con el silencio. Eso sí, los reyes han tenido que aparecer juntos en muchos eventos, poner su mejor cara y tratar de verse cariñosos entre ellos. 

Felipe VI
Felipe VI

Pilar Eyre, Jaime Peñafiel y otros periodistas especializados en monarquía española coinciden en que el vínculo que alguna vez tuvieron los reyes no existe. Lo cierto es que ya se habría planteado como solución el divorcio. No pueden estar juntos por más tiempo del necesario, menos desde que se supo sobre la presunta aventura de Doña Letizia. La imagen de la monarquía volvió a quedar afectada, pero es más complicado de lo que parece. 

Las condiciones de Letizia para divorciarse de Felipe VI

Desde hace años, se ha especulado sobre la tensión en el matrimonio real, y según la periodista Laura Rodríguez, la relación ha estado rota desde 2010. A pesar de las apariencias públicas, las diferencias entre ambos siguen creciendo, llevando a la situación actual en la que las negociaciones de separación se han vuelto un campo de batalla.

La royal, en su búsqueda por mantener su posición como reina, habría presentado una serie de peticiones que muchos consideran descabelladas. Exigencias que van más allá de los aspectos económicos. Son condiciones que superan lo razonable, lo que habría llevado a la Casa Real a considerar que no hay un camino viable hacia un acuerdo. La consorte no se conforma con tener propiedades y una pensión vitalicia considerable, parece estar dispuesta a tensar la cuerda al límite, buscando asegurar su estatus y condición de reina separada. 

Letizia Palma de Mallorca waterpolo
Letizia 

Uno de los puntos más controvertidos en las negociaciones es la negativa de la asturiana a aceptar lo que se había firmado antes de su matrimonio. Un hecho que dificulta aún más la situación, ya que los acuerdos iniciales establecidos se basaban en un entendimiento mutuo que ahora parece haber quedado en el olvido. La insistencia en obtener más de lo que se había acordado llevó a frustrar a los negociadores de Zarzuela.

A medida que la situación se desarrolla, queda en el aire la pregunta de cuál será el futuro de la monarquía española y cómo afectará este conflicto la imagen de la Casa Real. La tensión entre Felipe VI y Letizia no solo es un asunto privado, tiene implicaciones más amplias para la institución que representan. ¿Qué papel jugarán Leonor y Sofía en el desenlace?