Para muchísimas generaciones diferentes de niños, y no tan niños, unos dibujos divirtieron, emocionaron, entretuvieron y explicaron cosas sobre la vida como ningunos otros. Unos personajes que trascendieron la tira cómica del diario donde empezaron a aparecer y se convirtieron en una fiebre mundial, un icono en todo el planeta, especialmente, por su personaje más emblemático, que allí donde vayas, la gente lo reconoce.
Estamos hablando de los Peanuts del dibujante Charles M. Schulz. Aquel grupo de niños y sobre todo, aquel perrito mudo y tremendamente inteligente, blanco y negro, que se llamaba Snoopy y que se convirtió, no sabemos bien por qué, en un icono pijo. ¿Quién no recuerda aquel "Te lo juro por Snoopy"?.
Seguro que muchos nostálgicos se emocionarán al ver y recordar a los personajes que llenaban de sonrisas y color sus vidas hace mucho tiempo, en cómics o dibujos en la televisión.
De izquierda a derecha y de arriba abajo: Pig-Pen, el niño rodeado permanentemente de una nube de suciedad; Schroeder, tocando siempre su piano y de quien estaba enamorada Lucy; Franklin, el amigo de los rizos; Sally Brown, hermana pequeña de Charlie Brown; Marcie, la más lista del grupo; Peppermint Patty, atrevida y excelente jugando a béisbol; Linus Van Pelt, el mejor amigo de Charlie y hermano de Lucy; el inefable Snoopy; el protagonista, Charlie Brown; Lucy Van Pelt, hermana de Linus; y Woodstock, el pajarillo amigo de Snoopy.
Todos eran entrañables. Todos eran mágicos. Pero sin duda, la serie y las tiras cómicas tenían como protagonistas a Charlie (Carlitos) Brown y su mascota.
En nuestra casa, los personajes tenían unas voces dobladas, como es habitual, de los dibujos originales norteamericanos. Pero en los Estados Unidos, un hombre le daba voz y vida al mítico Charlie Brown.
Peter Robbins, la voz original del personaje de dibujos animados creado por Schulz durante los años 60 en los especiales de televisión que se hicieron cuando Peanuts empezó a coger mucho vuelo y tuvieron un éxito incontestable.
Desgraciadamente, una noticia ha dejado noqueados a todos los seguidores de los Peanuts, porque se acaba de saber de la trágica muerte de Sellers, a los 65 años. El actor se ha suicidado según ha informado su familia. Robbins había tenido algunos problemas de salud mental los últimos años y se encontraba en rehabilitación para recuperarse de una drogodependencia del alcohol y las drogas según ha informado la cadena Fox 5 de San Diego.
Los últimos años no fueron fáciles para quien daba voz a un personaje que hizo feliz a tantas generaciones. Sin ir más lejos, el año 2013 se declaró culpable de un delito de amenazas contra diferentes personas, incluida su expareja y el sheriff del contado de San Diego, ingresando en prisión. Robbins reconoció que sufría trastorno bipolar.
Robbins empezó a doblar al personaje de Charlie Brown con sólo 9 años y fue su voz en especiales muy recordados como 'Las Navidades de Charlie Brown', emitido en el año 1965, o 'Es la gran calabaza, Charlie Brown'.
Según la citada cadena, el actor amaba tanto a su personaje que tenía un tatuaje de Charlie Brown al lado de Snoopy en su brazo, un detalle que siempre que podía lucía orgulloso.
Más allá de ser para siempre la voz de Charlie Brown, Robbins participó en diferentes series de los años 60 como 'Rawhide', 'El show de Donna Reed', 'La Familia Monster' o 'Superagente 86'.
Descanse en paz.