Singular propuesta la de esta semana. Como pasaba a menudo hace más de 50 años, cuando los cocineros no eran estrellas tan visibles, un amante de la restauración pero no cocinero profesional, decide montar un restaurante cuidando cada detalle, haciéndolo a su imagen y semejanza. No sabe cocinar, pero es estudioso de la cocina, así que monta un equipo de cocineros que ejecutan sus ideas, proponen las suyas pero siempre bajo la filosofía del dueño.
Un dueño enamorado de Barcelona, Umberto, un venezolano culto, con teorías culinarias propias y autodidactas, que viene del mundo empresarial y cuya vida hoy se llama Malamén, el pequeño restaurante que os presentamos hoy. Un nombre que viene de que para él, la gente se tiene que portar mal (“malamén”) y beber y comer olvidando cualquier régimen, cualquier limitación. ¡Por si tenías dudas, nosotros los Miguelines, nos portamos fatal!
Restaurante diminuto, 30 comensales, situado en el Carrer Blai (paralelo al Paralel) en el que todos los sitios son de taburete, repartidos entre la barra y algunas mesas altas. Un local art déco, cuyo dueño dice que está inspirado en Barcelona pero que a los Miguelines nos pareció más de Nueva York. Espejos que recorren toda la estancia, luz de neón fuera y lámparas minimalistas pero doradas… no deja indiferente, no se parece a nada que hayamos visto hasta ahora por Barcelona. La propuesta es como el dueño, singular. Por cierto, dueño que, al estar en sala y ser esta muy pequeña, es un ingrediente que el cliente probará en muchos de los platos.
Propuesta gastronómica cuidada, con pretensiones y riesgos en los contrastes que no en las técnicas, que son básicas. Hay platos para picar, baratos, primeros bien de precio y segundos más contundentes que pasan de los 16€. Para empezar probamos las suaves “Croquetas de calamares en su tinta”, que hicieron famoso al local en una publicación de Time Out. Seguimos con un “Montadito de foie a la sartén”, con una base de cebolla, tan bueno como indigesto. Luego una tapita de “Morcillas con naranja” que, como amantes de la morcilla, nos parecieron un contraste mejorable. En la misma línea el “Tartar vegano”, hecho con remolacha en varias texturas a modo de trampantojo, un plato que tiene gracia pero que deben afinar.
Croquetas de calamares en su tinta
Montadito de foie a la sartén
Morcillas con naranja
Tartar vegano
Interesantes “Zamburiñas con salsa bearnesa”, muy bien ejecutadas, fáciles de comer y aptas para todos los paladares. Más contundente y realmente rico y personal, la “Ropa vieja con huevo poché”, que viene en una cazuelita en la que se mezcla todo, carne y huevo de yema líquida, con unas patatas pochaditas en el fondo. Plato que debes pedir... mira más abajo el vídeo que hicimos, se te hará la boca agua. También muy rico, el “Cochinillo en terrina”. Esta segunda parte es claramente más interesante que la primera que hemos explicado. Un arriesgado contraste “Magret de pato con salsa de menta”, fue el cierre a los platos salados que recogen el singular enfoque de Umberto.
Zamburiñas con salsa bearnesa
Ropa vieja con huevo poché
Cochinillo en terrina
Magret de pato con salsa de menta
Los postres, como los segundos platos, son curiosos aunque también tienen margen de mejora. La propuesta es ambiciosa, la visita vale la pena por distinta, por el local y por la propuesta. Es un sitio que estamos seguros de que va a ir perfeccionando su cocina, pero que hoy ya supone una muy buena experiencia.
¿Entonces, vas a portarte 'Malamén'?
| Puntuación | ||
|---|---|---|
| Comida | Vinos | |
| 66 | 65 | |
| Servicio | Local | |
| 65 | 68 | |
| Precio | Estrellas Miguelín | |
| 40€ |  |
|
| Por persona: 1 entrante, 1 principal, 1 postre (a compartir), 1 copa de vino | ||
¿Dónde está Malamén?
Dirección: Carrer de Blai, 53, 08004 Barcelona
Teléfono: 932 52 77 63
Horario: martes a domingo, de 20h a 00h. Lunes cerrado