Momentos complicados para una de las catalanas que más triunfa en todo el mundo. No es la Rosalía, pero se le acerca. La carrera de Aitana ha llevado un ritmo meteórico desde que saliera de la academia de Operación Triunfo 2017. Tres álbumes, infinitud de 'singles' publicados, premios por doquier, un libro de ilustraciones, un perfume y merchandising de todo tipo figuran entre las cosas que ya llevan su nombre. Es la Britney Spears nacional, la princesa del pop patria. Con todo, ya se sabe que cuando uno se convierte en estrella difícilmente podrá escapar de las habladurías de la audiencia. La gente ruega saber, los seguidores y detractores necesitan contenido para hacer el chismorreo indispensable. Concretamente, en materia de amores.
La de Sant Climent de Llobregat, más allá de tener una voz prodigiosa, siempre ha visto cómo sus parejas han tomado una magnitud considerable en la manera como es percibida por el público. Cabe decir también que el suyo, un ritmo frenético y cambiante propio de cualquier persona de 24 años, deja ya una lista de rupturas considerable y eso que solo hace seis años que saltó a la fama. A su novio del pueblo, Vicente, lo cambió con más o menos acierto por Luis Cepeda, de quien se enamoró mientras ambos participaban en OT. Un tiempo después le dijo bye bye al gallego para empezar la que ha sido su relación más estable —que se conozca— hasta la fecha. Aitana y el actor Miguel Bernardeau, hijo de Ana Duato y protagonista de ficciones como Élite, salieron desde el 2018 hasta el 2022.
Parecían enamoradísimos e incluso participaron juntos en la serie La última. Sin embargo, casi cuatro años después, kaputt. Esta sí que no se la veía venir a nadie, aunque más fuerte ha sido el último revés. Si bien nunca habían llegado a confirmarlo de manera oficial, todo el mundo era consciente de que ella y el cantante colombiano Sebastián Yatra habían empezado un idilio este mismo 2023. Siempre se habían declarado muy amigos, publicaron el tema Corazón sin vida y durante dos años han compartido plató ejerciendo de coaches en La Voz Kids. Sin embargo, no fue hasta el pasado mes de agosto que eran captados dándose besos en un barco durante unos días de vacaciones en las Pitiusas. La aventura perfecta que, en las últimas semanas, ya hacía aguas. La primera de las grandes pistas: Aitana se ha teñido de rojo como tantas otras artistas han hecho en plena ruptura.
Sea como fuere, los rumores efectivos nacerían de la no-presencia de la intérprete de Los Ángeles en la gala de los Grammy Latinos, en los que Yatra actuaba, o la boda del que entonces era su cuñado. También el hecho de que Aitana había sido vista en el País Vasco con Bernardeau e, incluso, se plateaba la posibilidad de una reconciliación. Sin embargo, algunas informaciones afirmaban que se les habría visto comiendo juntos en un restaurante de Sevilla en lo mismo, de manera que todo podría ser fruto de las invenciones populares y seguían juntos. Spoiler: no. El mismo Yatra lo ha confirmado al canal mexicano Telediario, donde ha aseverado que "nos queremos un montón. Somos y seremos grandes amigos de la vida. En este momento los dos estamos solteros, andamos cada quien viviendo su propio camino, pero la quiero muchísimo y vivimos una historia muy bonita este año". Y eso que hace solo cinco días estaban juntos por México. Huele raro, pero ciñámonos a la declaración de los implicados.
La reacción de Aitana vino antes. La catalana se echaba a llorar el pasado 26 de noviembre en medio de su presentación en Bogotá. "No pasa nada, hay días que estoy bien y hay días que estoy mejor". Dice que todo OK, pero es inevitable que los fans se queden preocupantes.
Comprendemos que no es ninguna coincidencia que eso le pase, precisamente, en la tierra de su ex. Quedamos a la espera de conocer cuál es el próximo afortunado en llenar el corazón de la cantante. Y esperamos que le dure un poquito más.