Malú paralizaba las rotativas el miércoles 6 de diciembre con una entrevista que se sirvió calentita. La cantante se sentaba en el Chester particular de Risto Mejide, en Cuatro, para hablar de asuntos personales y profesionales de todo tipo. Con todo, se cernía sobre la audiencia la duda sobre si profundizaría en el temazo de los temazos: su reciente ruptura con Albert Rivera. Y es que, aunque ya hace meses que ella y el expolítico partieron peras, cabe decir que el barcelonés tampoco le ha puesto las cosas muy fáciles para reponerse.
No es cuestión de estar demasiado afectada, que tampoco lo sabemos a ciencia cierta en vista de su hermetismo, pero sí de haberse visto perseguida por una presencia en la prensa rosa del de Ciudadanos durante el verano, día sí y día también. Rivera vivía su prime de soltero en agosto. Primero, fotos flotando en aguas del Mediterráneo con la actriz Aysha Daraaui. Después, la presentación oficial de su nueva chica, tan solo unos meses después de la ruptura, vía portada de la revista Semana. ¡Y no era Daraaui! Se ve que con ella solo tenía una amistad extraespecial, porque la afortunada de robarle el corazón ha sido la creadora de contenido y diseñadora Carla Cotterli.
Un lío total del que la intérprete de Blanco y negro prefería pasar completamente y limitarse a hacer unas declaraciones breves a Elle sobre qué había pasado para poner fin a la suya, una relación estable durante cuatro años y con una hija en común. "En ocasiones, crees en algo y luchas por ello con todas tus fuerzas. Pero a veces no se da", explicaba discreta y ambigua. En cualquier caso, eso de no ser demasiado transparente ha pasado a la historia después de la emisión de su conversación con Mejide. Malú charlaba sin tapujos sobre como el nacimiento de un bebé puede acabar siendo el motivo para hacer que un amor llegue a su fin. "Separa mucho si las dos personas no están en el mismo sitio". Ella, sincera y explícita. A todos aquellos que la acusan de haberse hecho 'un Shakira' con la publicación de la canción Ausente, deja claro que "he vuelto a hacer lo mismo que he hecho durante toda mi vida, contar una historia de dolor, real".
¿Y él, qué estaba haciendo mientras que esta chocante entrevista se emitía? La siempre incendiaria Amor Romeira mostraba en Fiesta unas imágenes en que se le ve con la nueva novia, enamoradísimo, de escapada romántica al municipio asturiano de Cangas de Onís. Según la colaboradora, se les vio muy felices y amables en todo momento, a excepción de una fastidiada total cuando una mujer local le preguntó "¿qué te ha parecido lo que ha dicho Malú con Risto?". El planteamiento le costó un cambio de rictus total, porque "no le gustó nada la pregunta" y su actitud habría cambiado.
Albert pasa de la sonrisa al enfado en menos tiempo que escaños tiene Ciudadanos en el Congreso. Y ya es decir.