Durante la década de los 90, una actriz dejaba hipnotizados a los espectadores con su presencia ante cámaras. Una intérprete norteamericana de cuerpo menudo, ojos penetrantes, cara de buena persona y sonrisa traviesa. Su melena corta y rubia era característica de muchísimas producciones donde actuó con grandes estrellas de Hollywood como Harrison Ford o Johnny Depp. Hablamos de Anne Heche, actriz a quien pudimos ver en películas como Seis días y siete noches, Donnie Brasco, Psicosis, Volcano, Sé lo que hicistéis el último verano o John Q. Después, su carrera no ha acabado de mantener el nivel de repercusión en el público con participaciones en filmes mucho más olvidables. Heche, de 43 años, también fue protagonista del papel couché por su relación con la presentadora de televisión Ellen DeGeneres o el actor James Tupper. Ahora, sin embargo, ha sido protagonista por unos hechos preocupantes que hacen temer por su vida.
Porque la intérprete norteamericana acaba de sufrir un gravísimo accidente y permanece en el hospital en estado crítico después de que el coche en el cual viajaba se estrellara contra un edificio en Los Ángeles, según ha informado la CNN y el portal de noticias TMZ. Su vehículo, un Mini Cooper azul, iba a demasiada velocidad, se saltó la carretera por la cual viajaba y chocó en llamas contra la vivienda. Se habla de que la actriz podría haber sufrido gravísimas quemaduras según las primeras fuentes. Las cámaras de una casa que había en la calle donde se produjeron los hechos han registrado el momento en que el coche de Heche pasaba a una velocidad aterradora por la zona antes del fatal impacto contra otra casa. Anne Heche se estrella contra un garaje de un complejo de apartamentos provocando un posterior incendio.
El accidente pasó poco después del mediodía en la zona de Mar Vista de Los Angeles, y después de que la propia Heche ya se hubiera estrellado con anterioridad en otro lugar de la zona residencial. Los vecinos del complejo de apartamentos intentaron sacar a Anne del vehículo, pero ella puso el coche en marcha atrás y después se fue. Poco tiempo después, se estrelló contra una casa próxima y encendió el incendio que ha hecho que esté en una situación muy grave.
El coche quedó completamente calcinado y después de las primeras investigaciones encontraron una botella con una tapa roja en el portavasos al lado del cambio de marchas, parece ser que una botella de alcohol.
Después del grave impacto, los cuerpos sanitarios fueron rápidamente al lugar de los hechos y se la llevaron al hospital, aunque a estas alturas no se sabe el alcance de sus heridas y quemaduras. Por lo visto, está intubada y a pesar de la gravedad, se espera que pueda sobrevivir. Eso sí, su estado impide de momento que los médicos hagan ninguna prueba para determinar si conducía bajo los efectos del alcohol o no.