Leo Messi es el mejor jugador de la historia del fútbol. Por lo tanto, es evidente que también ha sido el mejor jugador de la historia del Barça. Robert Lewandowski es, si no el mejor, uno de los mejores delanteros que ha fichado el Barça los últimos veinte años. Un jugador descomunal, con un talento y una adaptación alucinante en cuatro días que lleva vestido de azulgrana. Se ha integrado en la disciplina del vestuario azulgrana a velocidad de crucero, siendo un referente para los compañeros, siendo un maestro para los más jóvenes, siendo un killer con una facilidad pasmosa para enchufarlas en la portería rival y adaptándose a las mil maravillas a su nueva vida en Barcelona, visitando incluso de incógnito la Sagrada Familia, con gorra, gafas de sol y una máscara. Del argentino no hace falta decir mucho más. Los culés nunca le estaremos lo suficientemente agradecidos de cómo nos ha hecho sentir, de cómo nos ha hecho emocionar viéndolo jugar en el Camp Nou, de todas las burradas que ha hecho con una pelota en los pies.
A menudo se ha dicho del delantero polaco que si no hubiera sido por Leo Messi, hubiera ganado un Balón de Oro. Pero cuando jugaba en el Bayern vio como la entonces estrella del Barça le volvía a comer la tostada. En el 2020 no lo ganó, año de la pandemia, cuando probablemente él habría sido el vencedor en una temporada donde lo ganó todo con el conjunto alemán. Y el año pasado, el argentino volvió a levantar el Balón de Oro por delante suyo. Ahora, Messi está en el PSG y Lewandowski en el Barça. Pero los últimos tiempo corre un rumor que aunque tiene a muchos culés sin estar convencidos del todo, muchos otros ya salivan con que la posibilidad se vuelva real. ¿De qué? De que Leo Messi vuelva la temporada próxima al Barça, tal como apuntan algunas informaciones.
¿Se imaginan a Messi y Lewandowski vistiendo de azulgrana al mismo tiempo? Chi lo sa. De momento, el entorno del crack argentino recuerda que su casa es Barcelona, aunque el último año haya hecho las maletas hacia París. Veremos qué pasará cuando acabe esta temporada y si algún día volveremos a tener al mejor jugador de la historia con la camiseta del Barça. Desconocemos cómo está la relación (si es que la hay) entre los dos futbolistas. Lo que ahora hemos comprobado es la buena sintonía entre sus parejas, que han coincidido en un acto lleno de glamour en la capital francesa.
Paris Fashion Week. Desfile de Louis Vuitton. Y hacia allí que ha ido Anna Lewandowska, gran amante de la moda. Jersey espectacular con rayas amarillas y azules, botas altas negras hasta las rodillas y un bolso de mano espectacular, que parece un cofre pequeño. ¿Y con quién ha coincidido? ¡Bingo! Con Antonela Roccuzzo, que también ha ido, y más, viviendo ahora allí. La mujer de Messi, vistiendo un dos piezas negro, chaqueta azul tejana, botas también altas y negras y un bolso de mano de color rosa. Y junto con ellas dos, una tercera invitada ilustre, la mujer de Cesc Fàbregas, e íntima de Antonela, Daniella Semaan.
Espectaculares looks. Empresarias exitosas, apasionadas por la moda, casadas con dos cracks mundiales... Primera toma de contacto entre dos mujeres que, quién sabe, quizás compartirán palco en el Camp Nou la próxima temporada.