Ahora hace dos años una noticia sacudió el mundo de la música. La estrella más rutilante de la música electrónica de los últimos tiempos, el DJ sueco Avicii, era encontrado muerto. Multimillonario, llenando escenarios de todo el planeta, haciendo bailar a millones de personas con su música, Avicii fue encontrado muerto con sólo 28 años en Omán. Hacía dos años que se había retirado por consejo médico, fruto de su alcoholismo y sus depresiones, cobrando un cuarto de millón de euros por bolo. Desde que se hizo pública la defunción, se sucedieron las informaciones en torno a su muerte.
Las conclusiones a las cuales se llegó fueron trágicas: rompió una copa y se clavó los cristales autoprovocándose la muerte. Su suicidio dejó golpeados a sus seguidores. Todo el mundo lloraba que alguien como él, que lo tenía todo, hubiera acabado de aquella manera... Una muerte como esta siempre deja muy tocado. Pero ahora, dos años después, vuelven la polémica y las sombras. Porque la red Anonymous ha vuelto a dar señales de vida. Y lo ha hecho con unas revelaciones sobre la muerte de Avicii que han dejado en shock a todo el mundo. Explican que el sueco fue asesinado. Que alguien lo mató por tener información y conocer qué pasaba en las altas esferas políticas, después de estar en muchas fiestas de élite en los Estados Unidos, y conocedores de muchas de las cosas despreciables que pasaban en estas fiestas, centralizadas en las figuras de Jeffrey Epstein y Donald Trump.
No sólo eso, junto con el nombre de Avicii, también aparecen nombres de celebrities que quizás no murieron de manera casual, como Paul Walker o Chris Cornell. La denuncia también indica que el DJ habría dejado muestras de lo que sabía en el videoclip For a better day.
Una muerte que, dos años después, continúa rodeada de polémica.