La actriz Beatriz Rico es de aquellas personas que tiene la virtud de ser, no solo alguien buenísimo en su trabajo, sino además, una persona que habla claro, que se moja cuando toca y que no se calla cuándo alguna cosa de su alrededor chirría. La intérprete asturiana lleva ya muchos años forjándose una sólida carrera delante de cámaras y encima de los escenarios. Lo testifican sus películas, obras y series como Historia de un besoTiovivo c. 1950Si yo fuera rico, A las once en casa, Jacinto Durante, representante, 7 vidas, Un paso adelante, Ellas y el sexo débil, Manolo y Benito Corporeision, La que se avecina, Don Juan Tenorio, Los 39 escalones, Swingers o Palabras encadenadas. Actualmente triunfa en los teatros de Madrid con Remátame otra vez, de Alberto Papa-Fragomén y Rodrigo Sopeña.

Ahora, a los que ha rematado a base de bien es a los del diario El Mundo por lo que han dicho de ella. Rico, hace muchos años, en 1992, cuando ella tenía 22, trabajó en Telecinco presentando el programa infantil Hugolandia:

Pero hubo un momento en el cual lo dejó. Ahora acaba de conceder una entrevista al diario El Mundo, donde ha leído palabras en boca suya que niega rotundamente, por ejemplo, que "Telecinco explotó mi cuerpo". Y ha estallado, publicando un hilo demoledor que empieza así: "Que a estas alturas tenga que seguir llevándome disgustos por titulares en prensa es muy triste. Hoy, en 'El Mundo', cositas que al que escribe le pueden parecer tonterías, pero a ti te hacen daño porque ni lo has dicho ni se acerca de lejos a lo que piensas. JAMÁS he dicho que T5 “explotó mi cuerpo”. Es una barbaridad ofensiva, es más, siempre me sentí muy cuidada en ese sentido por Sebastián Junyent, director del infantil que presentaba. Literalmente “el día que llevaba shorts, me ponían cuello alto y el día que llevaba camiseta de pico, vaqueros largos”. Poner en mi boca que T5 “explotó mi cuerpo” es dañino, y sobre todo, incierto".

Rico niega la idea que subyace de que le entró pánico al “ser famosa y ganar dinero”... "No es cierto: dejé la cadena porque quería ser actriz. Nunca tuve pánico, si bien es cierto que en la entrevista se explica que me vi confundida por la fama repentina, una especie de “síndrome del impostor” que solucioné rápido. Estoy dolida y confusa porque no me lo esperaba, y porque es precisamente lo contrario de lo que dije. Nunca me han explotado ni yo lo hubiera permitido, es tremendo, de verdad" y reta al diario a publicar la entrevista grabada si es que dijo lo que ellos ponen. Pero "si no ha sido así (y sabemos que no lo ha sido) te ruego que, ya que en papel no se puede hacer nada, si finalmente sale la edición digital, se corrija. Siento exponerlo públicamente, pero si la entrevista es pública, lo justo es que mi queja también lo sea, ya que ese periódico hoy está en manos de los lectores. Perdón, pero es que según lo leo peor me pongo. “Viví un episodio de acoso y decidí dejar la cadena”. No es verdad. Parece que me fui porque me acosaron. No es verdad. Qué disgusto tan grande y, además, tan fácilmente evitable. No me lo merezco":