Bertín Osborne no se cansa de dar que hablar por sus torpezas. El presentador está a punto de convertirse en padre de su séptimo hijo a los 69 años, aunque ya es por todos sabido que no tiene ninguna intención de ejercer como tal. Ha dejado a Gabriela Guillén, la que hasta hace unos meses fuera su pareja, totalmente desamparada en un momento tan crucial como es emprender el camino hacia la maternidad. Así lo ha demostrado su actitud en repetidas ocasiones durante los últimos y transcendentales meses, en los que la audiencia ha podido ser partícipe de su implicación nula en el embarazo de la paraguaya.
Ella, por su parte, ha procurado guardar silencio y tirar hacia adelante sola de la mejor manera que ha podido. Sin embargo, la presión mediática en casos como este es prácticamente imposible de obviar. En este tiempo, informaciones como que el de Canal Sur ha pedido una prueba de paternidad a la modelo, así como que también le habría cortado el grifo y dejado de pasar dinero para ayudarla, lo han puesto todavía más en el punto de mira. Eso y otras cuestiones todavía más surrealistas, como sus constantes encontronazos con la prensa allá donde va, o la enésima amante que habría mantenido en secreto durante los últimos años. En palabras de Lorena Vázquez y Laura Fa, las mamarazzis, esta mujer, que todavía no se ha pronunciado, se llama Marta, tiene 40 años, es de Barcelona y llevarían desde el 2017 encontrándose de forma intermitente. "Está dolida pensando que Bertín ha mantenido tantas relaciones que ella en realidad no era nada importante en su vida", contaban en primera instancia las cronistas catalanas.
Entrando en detalle, las periodistas incidieron en que "uno de los restaurantes a los que más solía acudir Bertín con Marta es al Negro, en la Avenida Diagonal" en la demostración de que "no se escondían a pesar de estar ambos con pareja, tenían una vida paralela que creían única". Sea como fuere, y a pesar de que este tema se ha convertido en uno de los más sustanciosos de las últimas semanas para la crónica social, parece que el madrileño no se harta de marear la perdiz. Otro de sus amores furtivos, ya conocido por la audiencia, ha desvelado que Norberto se ha puesto en contacto con ella cuando quedan menos de tres semanas para que Guillén salga de cuentas, el 31 de diciembre. Ya se sabe que él pasa, tanto como para que la esteticista confirmase que no tiene ninguna intención de ponerle su apellido porque "un niño recordará quién estuvo con él, no quién gastó más".
Al parecer, ha preferido buscar consuelo en Encarna Navarro, también conocida como Enna, primera expulsada de la quinta edición de Operación Triunfo de quien él ha renegado en más de una ocasión, a pesar de que existen pruebas públicas de que se conocen muy bien. Ha sido la cantante quien, en declaraciones para 20Minutos, ha contado que Osborne la ha contactado después de romper el vínculo cuando ella hizo público su longevo idilio. Además, de una forma muy sospechosa. Vía telefónica, con una llamada en la que le preguntaba si su teléfono estaba estropeado.
En palabras que recoge el digital, Enna expone que "no creo que fuera por error, porque tuvo que buscarme y llamarme". Nosotros tampoco.