Sin duda alguna la actuación de Beyoncé en el festival californiano de Coachella marcó un antes y un después. Con coreografías milimétricas, espectaculares movimientos de curvas y un total de 26 canciones Beyoncé arrasó en uno de los certámenes más esperados del año. Dejó de ser el momento de la noche para convertirse en la performance que sería recordada de por vida por todos sus seguidores. Y es que hasta Rihanna se levantó de la silla cuando la vio salir al escenario.
La cantante de Diamonds pudo disfrutar al máximo al verla actuar desde primera fila y su reacción se viralizó en las redes sociales.
Tampoco dejó a nadie indiferente por su outfit durante el concierto.
Todos sabemos que entre las dos artistas siempre ha existido una cierta tensión. En primer lugar, por los rumores de la relación que mantenía el marido de Beyoncé, Jay-Z, con la de Barbados. Y, en segundo lugar, la polémica entre ambas por Twitter en la que Rihanna dio like a una publicación que decía que el tema Desperado de Riri había tenido un mayor impacto que Formation, el presentado por Beyoncé en la Super Bowl 2016.
El momento estrella llegó cuando Beyoncé decidió sorprender a todo el público y volver a reunir a las Destiny’s Child, el grupo musical con el que saltó a la fama. La cantante de Work estuvo a tope hasta el final. Rihanna no paró de bailar y los comentarios en las redes dejaban entrever la emoción que se respiraba tras su reacción.
¿Reconciliación a la vista? Y no solo vimos a Rihanna. Adele, Cara Delevingne o Sam Smith fueron algunos de los famosos que también tuvieron el privilegio de ver la actuación de la Queen B.