"Su corazón es indomable y no me quiere y yo me muero por su amor. Y nunca puedo convencerla, siempre me dice que no. Habla con ella, por favor". Es la vuelta del superhit del grupo Camela "Corazón indomable", probablemente su canción más emblemática. Habla de una pareja sentimental. Pero exactamente podrían referirse a una Catalunya que según ellos, les volvió la espalda cuando empezó a coger fuerza la cuestión independentista. Los madrileños Ángeles Muñoz y Dioni Martín llevan 25 años dando vueltas por todo el país con su tecno-rumba. No hay gasolinera que se precie que no tuviera un expositor de cintas de cassette del grupo. Por algo son el segundo grupo español que más ha vendido de los últimos 30 años.

Para celebrar su trayectoria han sacado un nuevo trabajo recopilatorio repasando sus grandes éxitos y grabando alguno de sus temas con diferentes artistas, como Taburete. Precisamente el grupo del hijo de Luis Bárcenas ha sido considerado como uno de los máximos exponentes de la música que escuchan las juventudes peperas, de Cs y de Vox. Willy Bárcenas, sin embargo, le dijo a Risto Mejide en el Chester que él es apolítico a pesar de la militancia de su progenitor, y que cuando ha aparecido con una rojigualda en el escenario es por que se la han tirado desde el público. "Si me tirarán una bandera catalana también lo haría; una estelada, no".

Sobre la independencia también se ha hablado en una entrevista que los Camela han dado para el diario El Mundo. Viene siendo habitual que cuando un artista es entrevistado por este medio, cae indefectiblemente la pregunta de rigor sobre el procés. En este sentido ellos consideran que el independentismo les pasó factura, tal y como semanas atrás se quejó Toni Cantó. Acostumbrados a tocar mucho en Catalunya durante los primeros años de existencia, poco a poco las contrataciones fueron a la baja: "Era de las comunidades en las que más trabajábamos, pero cuando empezó esto de la independencia hubo un bajón muy grande, nos dejaron de llamar de muchos pueblos a los que solíamos ir. No sólo para nosotros, para todos los artistas españoles".

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La diferencia, sin embargo, con el actor reconvertido en político, azote del independentismo, es que mientras él se refugia en este victimismo para justificar que sus obras no interesen en los teatros catalanes, los Camela están dispuestos a demostrar que ellos también tienen un sitio en Catalunya por mucho que se les represente como un grupo icónico de la sociedad española:  "Ahora con este disco sí vamos a ir, de hecho uno de los dos conciertos estrella de la gira será el de Barcelona. Nosotros vamos encantados a Cataluña y a cualquier sitio. Nos quieren en todos lados".

 "Hemos tocado algunos temas sociales: racismo, violencia de género, enfermedades... pero siempre desde la perspectiva del amor. Somos apolíticos. Yo sólo he votado tras el atentando del 11M, que era una situación muy concreta", argumentan. Sea como sea, a finales de mayo volverán a hacer bailar al público catalán después de mucho tiempo sin hacerlo.