Este pasado fin de semana ha hecho un tiempo feúcho, para aquellos a los que gusta mucho ver el sol, pasar calor e ir con camiseta de manga corta. Para los que nos encanta el frío y los ambientes de invierno, ha sido una delicia. Un sábado lluvioso, grisote, donde hacían falta jersey y chaqueta, y gorra de lana, y donde han caído algunas gotas en muchos lugares de Catalunya. Y el domingo, más o menos, tres cuartas partes de lo mismo. Clima frío, propicio para encender alguna chimenea o para perderse en algún rincón de nuestro país en medio de la lluvia y las calles mojadas. Y eso es lo que ha hecho un presentador muy querido de TV3, el gran Carles Costa.
Excorresponsal de TV3 en París o Londres, donde el clima por aquella zona acostumbra a ser de cielo tapado y nubes, el bueno de Carles ahora hace tribunales y lo vemos a menudo en el TN Vespre o muchos días en Col·lapse, los sábados. Una costumbre muy habitual de su compañero en el TN Vespre, el editor y presentador Toni Cruanyes, justamente, la persona a la cual de vez en cuando sustituye Costa cuando el primero no puede hacer programa o porque ha ido fuera a cubrir algún acontecimiento de mucha magnitud, es la de no parar quieto los fines de semana, recorrer el país de arriba abajo y adentrarse en paisajes, fiestas populares o costumbres bonitas de alguno de los rincones preciosos que tenemos en nuestra casa. Y este fin de semana, Carles ha seguido el ejemplo de Cruanyes y ha hecho lo mismo.
¿Dónde ha ido? A un pueblo absolutamente maravilloso, bonito hasta decir basta, que los que hemos tenido la suerte de visitar de vez en cuando nos provoca un estado del bienestar que te carga las pilas por muchos días. Un rinconcito bonito, tranquilo, idílico, lleno de callejones y casitas de piedra que te quedarías a vivir en cualquiera de ellas. Un pueblo de aquellos que los catalanes estamos orgullosos y que sale en cualquier recomendación cuando gente de fuera te dice que le digas algún sitio bonito para ir a visitar: Monells. Pueblo medieval del Baix Empordà, construido en torno al antiguo castillo, del que solo quedan las murallas, pasear por sus calles hasta llegar a la plaza de Jaume I es un must obligado. Haga bueno o esté el cielo tapado, como ha comprobado Carles. Ningún problema por cuatro gotas: paraguas y a pasear por este romántico lugar, probablemente en compañía de quien le ha hecho las fotos.

Al verlo, la gente de la zona y los que lo han reconocido, se han emocionado y han aplaudido la elección que ha tenido Costa para "desconectar", tal como él ha escrito: "¡Disfruta crack! Una fructífera manera de desconectar teniendo contacto con un ambiente rural rodeado de naturaleza, "Siempre vale mucho la pena ir a Monells!!!! ¡Es una maravilla!!, "Parece que te han dejado todo el pueblo para ti...!", "Disfruta mucho de la desconexión, bien merecida. Qué pueblo más tranquilo y bonito. Me recuerda a Peratallada "La de los 8 apellidos catalanes!! ¡Muy chulo Monells!!", como dice este usuario haciendo referencia al hecho de que aquí se grabó justamente la continuación de Ocho apellidos vascos, Ocho apellidos catalanes... Carles Costa i Osés, maravilloso. Y Monells, también.