Poco antes de que el ingreso en prisión de Daniel Sancho fuese efectivo, una de las redactoras de El programa del verano tenía la oportunidad de hablar con él por teléfono y saber cómo se encontraba. La noticia del presunto asesinato del cirujano colombiano Edwin Arrieta se ha convertido en un fenómeno global, teniendo en consideración lo macabro del asunto. El hijo del actor Rodolfo Sancho ha admitido su culpabilidad. Él dice que mató y descuartizó a Arrieta, con el que también ha reconocido que mantuvo relaciones sexuales. En la llamada grabada y emitida en el formato de Telecinco, el chef madrileño se mostraba aparentemente tranquilo dentro de lo sórdido de la situación y refería a un muy buen trato de las autoridades de Tailandia, país donde se produjo el crimen. Tranquilidad que, al parecer, habría llegado a su fin.
Habla el director de la cárcel de Koh Samui
Sancho ya ha pasado su segunda noche en la cárcel de Koh Samui, el penal en el que se le ha asignado permanecer de forma provisional hasta que se acerque la fecha del juicio. Un lugar que, como ya anticipamos en EN Blau, dista mucho de los idílicos resorts y hoteles por los que el hijo del protagonista de Al salir de clase solía moverse. Más teniendo en cuenta que se trata de una cárcel tailandesa, cuyas comodidades también se desmarcan de lo que podría imaginarse en un penal europeo. Nada de camas, celdas superpobladas y unos menús nauseabundos serían solamente algunas de las consecuencias de su presunto delito. El periodista Jorge Luque ha tenido acceso a la prisión y ha podido hablar con el director de la misma para conocer cuál es la evolución de Sancho y si se adapta a este hostil entorno.
De acuerdo con la información recogida en el programa, el detenido sigue cumpliendo con el periodo de aislamiento reglamentario de acuerdo con los protocolos contra el coronavirus. Eso sí, Daniel Sancho ya ha hecho algunas peticiones. Destaca la solicitud de medicación para la ansiedad, porque ya no está tan tranquilo como decía. También ha pedido comunicarse con su familia, algo que no podrá hacer hasta que no salga del aislamiento, así como poder disponer de más comida. Recordamos que algunos medios hablaron de desayunos basados en huesos de pollo y poco más. Otro revés para él, la obligación de cumplir con uno de los protocolos de este centro penitenciario. El peluquero de la cárcel ha sido el encargado de cortarle la larga melena rubia que lucía desde hace algunos años.
Será acusado de asesinato premeditado y se enfrentaría a la pena de muerte
También el formato de Mediaset ha podido conocer que la policía tailandesa considera tener en su posesión pruebas más que suficientes como para acusar a Daniel Sancho de un delito de asesinato premeditado. Un crimen que supondría la pena de muerte, legal en el país asiático, más teniendo en consideración la confesión de lo sucedido.
También es de dominio público que Rodolfo Sancho ha aterrizado en Tailandia, pero todavía no puede ver a su hijo. Por ahora, al recluso solo se le permite mantener contacto con el abogado tailandés que su familia ha contratado.