Dani Alegret, Joan Enric Barceló y Ferran Piqué, o lo que es lo mismo, Els Amics de les Arts, son uno de los grupos más bien paridos de la música de este país. Ya hace años que se mueven, han conseguido crear un estilo de canciones personal, inimitable y característico, con unas letras maravillosas acompañadas de una música esmerada y rica en matices. Desde que en el 2005 asomaron la cabeza, sus temas no han parado de sonar y ya forman parte del ideario colectivo: Jean-Luc, Monsieur Costeau, L'home que treballa fent de gos, El seu gran hit, 4-3-3, Ja no ens passa, Louisiana o els camps de cotó y tantos y tantos otros.
Con seis discos a sus espaldas, han actuado por todos los rincones del país, delante de miles de fans. Pero no sólo los han podido disfrutar en nuestro territorio. Porque de vez en cuando también han hecho alguna incursión por todo el planeta. Como ahora, donde una gira los ha llevado a actuar en los Estados Unidos y Canadá, éxito total, los norteamericanos y los canadienses han quedado encantados con la propuesta del trío encima de los escenarios del 'Lion d'Or' de Montreal, el 'Joe's Pub' de New York y el 'Palisades Hub' de Washington.
Esta era la cara a punto de despegar hacia la primera parada del tour. Expectantes, impacientes, ilusionados... El retorno no ha sido tan agradable. Y eso que todo había ido como la seda. Incluso, después de actuar, también tuvieron la suerte de ver in situ un concierto de otra catalana ilustre, Rosalía. Aprovechando su estancia en la ciudad de los rascacielos, "Hemos ido a ver The Book of Mormon y después al concierto que Rosalia daba en el Radio City Music Hall. Difícilmente igualable. Final de Gira Americana arriba de todo. Gracias Rosalía por las invitaciones, ha sido espectacular":
Todo iba a las mil maravillas hasta que ha llegado la hora de volver hacia casa. Como ellos lamentan, con toda la resignación del mundo, "no todo podía salir redondo. Gastamos toda suerte la noche de Book of Mormon y Rosalia. Y claro, cuando tienes que coger el vuelo de vuelta, patam". Un patam que se resume en un retorno maratoniano: "Hemos salido de New York LaGuardia con dos horas y media de retraso. Un desastre. No nos han dejado subir al vuelo de Toronto-BCN (que, ojo, todavía no había salido y ha acabado elevándose una hora y pico después de que llegáramos) porque las maletas no estaban a tiempo de embarcar y la ley canadiense dice que no puedes viajar separado de tu maleta. Vale. Nos han enviado a un mostrador, hemos hecho una hora y media de cola y la mejor cosa que nos han conseguido es viajar vía Frankfurt. Ahora acabamos de aterrizar. Tenemos que esperar ocho horas en el aeropuerto y cruzamos los dedos para que cuando lleguemos a BCN esta noche pasada la medianoche, nuestras maletas cargadas de material técnico aparezcan en la cinta.... ¡Ah! Y con jet lag del chungo encima".
Pero quien no se consuela es porque no quiere. Así han podido hacer un poco de turismo por Frankfurt... y ver lo bien que se conserva Tom Cruise: "Suerte que nos han puesto 'Top Gun: Maverick' en el avión. Es entretenida, liga bien con la primera parte, resuelve temas pendientes y dices: carambas este Tom Cruise cómo se conserva. ¡Ah! Y Jennifer Connelly, todo un mito para una generación que hemos crecido con pelis como 'Laberinto'. ¿Alguna cosa para ver en el centro de Frankfurt? ¿Algún lugar bueno para comer? Seguiremos informando"...
Como dirían ellos mismos en El matrimoni Arnolfini, "volver siempre es la mejor parte de la aventura"... aunque no siempre. O cómo diría Rosalía, malamente. Muy malamente la atención recibida y el via crucis que han tenido que sufrir Dani, Joan Enric y Ferran para volver a casa.