La película más taquillera del cine catalán de la última década es, con merecimiento, Casa en llamas. La maravillosa reunión familiar en Cadaqués dirigida por Dani de la Orden, con una Emma Vilarasau superlativa, acompañada de manera excelente por María Rodríguez Soto, Enric Auquer, Clara Segura, Alberto San Juan o Macarena García. Un espectáculo, una historia brutal, unos diálogos, unos secretos, unas miserias de unos personajes a los que tan pronto odias cómo entiendes por qué son como son.

Probablemente, la escena más icónica de la película, la que se utiliza en muchos memes y todo el mundo reconoce, sea esta, con la protagonista haciendo una peineta.

Emma Vilarasau en Casa en llamas
Emma Vilarasau en 'Casa en llamas'

Peineta que le hace Emma a operarse según qué. Pero vayamos por partes. Maravillosa Vilarasau interpretando uno de los papeles de su vida, uno más a una larga lista llena de personajes memorables. La lista es de traca. En series de televisión: Ventdelplà, Majoria absoluta, Mirall trencat, Crims, Nissaga de poder, Secrets de família... En teatro: La Flauta mágica, La boda de Fígaro, Un tranvía llamado deseo, Un matrimoni de Boston, Agost, ¿Quién teme a Virginia Woolf?, La madre, Medea, La cabra, ¿o qui és Sylvia?, L'oreneta... O en películas: Los sin nombre, Las voces de la noche, Para que no me olvides, Los niños salvajes... Interpretaciones absolutamente deliciosas, cargadas de veracidad, de aquellas que te dejan plantado en la butaca. Emma es todo verdad, todo pasión, todo dejarse la piel delante de cámaras o encima de los escenarios. Y a eso la ha ayudado su talento... y su cuerpo, el que tiene, el suyo, guste a quien guste, sin artificios ni bisturí que le cambie la fisonomía.

Ha hablado en una conversación con Albert Om para el diario Ara, donde ha confesado la relación no siempre fácil con su cuerpo, "de joven habías tenido una relación tempestuosa con tu cuerpo", le recuerda Om. "Toda la vida. Una relación muy difícil con la comida. Todavía ahora, porque eso ya lo arrastro de tantos años". ¿Y ahora?:... "No quiero engordar..., pero como todo cae, y contra eso no puedo hacer nada, y operarme no me operaré". Una firme convicción que refuerza de manera brillante: "Anna Magnani siempre decía: 'No me maquilles las ojeras, que me ha costado mucho tenerlas, son muchas noches sin dormir'. ¿Operarte, operarte las tetas, para hacer qué? ¿Para alargar qué? ¿Cinco años tu juventud? Mirarte al espejo y decir: 'No sé si soy yo, exactamente, debe ser muy traumático'. Y más en su trabajo: "Después, para trabajar todo lo que es la gestualidad de tu cara, tú ya no la controlas, ¿cómo trabajas con la cara?... No, no, no".

Emma Vilarasau, maravillosa.