De nombre vasco y orígenes gallegos, Itziar Castro (Barcelona, 1977), ha trabajado a las órdenes de directores como Paco Plaza, Pablo Berger o Álex de la Iglesia. Ha hecho cine, televisión, teatro, burlesque o cabaret, y ha cantado para Susan Sarandon y junto a Gloria Gaynor. Después de dos décadas dando el callo, el 2017 se ha convertido en un año dulce para ella. Ha recibido el Premio a Mejor actriz en el Festival de Cine de Terror de Buenos Aires por Matar a Dios (Premio del Público Sitges 2017), es una de las nominadas a los Goya 2018 como mejor actriz revelación por su papel en Pieles, y está rodando la próxima temporada de Vis a Vis. Esta cantante que baila, esta bailarina que actúa, esta actriz de terror, comedia y drama, es lo que Paquita Salas (la serie que no puedo dejar de recomendar este año) llamaría “la actriz 360”: lo defiende absolutamente todo.
Hablamos con ella de físicos no normativos, del papel de las mujeres en la industria del cine y de su nominación a los Goya. Este año, a las 86 nominaciones masculinas se enfrentan las 30 adjudicadas a mujeres por la Academia.
Enhorabuena por tu nominación a los Goya, ¿te lo esperabas?
La verdad que tenía la ilusión de que saliera y las ganas también.
Pieles es una película muy arriesgada, difícil de digerir y, a ratos, incómoda para el espectador. ¿Qué pensaste cuándo te llegó el guion? ¿Tuviste dudas para participar en la película?
Yo formé parte de la previa a Pieles que es el cortometraje Eat My Shit, en el que ya estamos Ana Polvorosa y yo, y que después se convirtió en una secuencia de la peli, así que ya no me pillaba de nuevas. De hecho, cuando me llegó el guion, lo que vi es que había crecido mucho más esa idea del corto y la maravillosa destreza que tiene Eduardo para describir momentos y personajes realmente complejos. Y pensé que era muy arriesgado y muy difícil… pero lo que nos pasó a todos los actores es que Edu es capaz de explicarnos el por qué de cada cosa de una manera tal que al final no te da pie a que digas “no”. Aunque te lleve fuera de tu zona de confort, que es lo que hizo con la mayoría de los actores, te dejas llevar porque lo que a priori podría haber sido un hándicap, se acaba convirtiendo en algo maravilloso.
La intención de Pieles está clara: reivindicar los físicos no normativos y su espacio ¿Crees que es importante que se haga este tipo de cine?
Creo que es importante que se haga el cine que cada uno quiera contar. En este caso es cine de autor. Edu es un autor que tiene un sello muy concreto, una idea muy concreta, un look… y lo que quiere es contar que en la diferencia está la vida, y la variedad de que no todos tenemos que ser iguales. En realidad, si quitas todas esas capas de personas deformes, es una historia de amor y desamor de las que nos pasan a todos.
El cine comercial es bastante inflexible en cuanto a los cánones de belleza, de hecho es una de las canteras de guapas (y guapos) oficiales. ¿Te has encontrado con muchos problemas a lo largo de tu carrera por tu físico?
Evidentemente sí, pero no sólo en esta profesión, en la vida en general. Ser una persona XXL en una vida S, es muy complicado. No cabes en muchos lugares, los asientos no están pensados para ciertos culos, y evidentemente me he encontrado con eso. Debo decir que en la profesión he tenido la suerte de que, aunque es cierto que no hay tantos personajes para gente de talla grande, tampoco hay tantas actrices con ese perfil. A mí mi físico me ha ayudado porque me hace estar en un grupo reducido de personas que acceden a ciertos personajes. Es verdad que en el cine y en el arte en general hay un tema de cánones de belleza, pero si eres diferente también puedes destacar. Le ha pasado a gente como Rosi de Palma y ahora me pasa a mí. Los problemas se notan mucho más en el día a día. A mí hay gente que me ha insultado por la calle y al saber que era actriz han venido a pedirme un autógrafo después.
Siempre dices que te quieren por tu físico. Al final te va a pasar como Mario Casas, que está harto de que lo valoren por su físico.
Mario es un chico maravilloso, encantador, trabajador y realmente es mucho más que un físico. Él ya lo está consiguiendo y va a demostrar que es un gran actor y no sólo una cara bonita. En mi caso muchas veces me han llamado mis representantes que han hablado con directores de casting al recibir mi material por primera vez y les han dicho ¡oh es muy buena, puede hacer más cosas que de gorda! Pues sí, no sólo soy gorda, también soy actriz y también llevo muchos años en esto. Yo he tenido la suerte de que he llegado a personajes cómicos, dramáticos… y he hecho terror, cabaret, circo o musicales. Evidentemente es porque puedo sostener todos esos estilos.
En el cine español los personajes femeninos representan el 37% frente al 62% de los masculinos. En Hollywood, la proporción todavía es peor: de cada diez personajes, sólo tres son mujeres que hablan. Aunque es verdad que el número de mujeres protagonistas está subiendo tímidamente en los últimos años, todavía sois la aplastante minoría. ¿Por qué hay tan pocas historias protagonizadas por mujeres y a quién le tenemos que echar la culpa?
Los órganos de poder siguen están copados por hombres, desde los presidentes del Gobierno hasta los representantes de la Cultura. Por ejemplo, hasta esta legislatura Barcelona no había tenido nunca una alcaldesa. Hacen falta mujeres en cargos de poder que decidan qué guiones y qué películas tiran adelante. Porque sí que hay guiones escritos por mujeres, sí que hay guiones que hablan de mujeres y sí que directoras mujeres. Isabel Coixet ha hecho una película que es cien por cien femenina, La Librería, y que tiene 12 nominaciones a los Goya. Pero la mayor parte de los proyectos no ven la luz. De hecho, la propia Coixet tiene un proyecto maravilloso parado desde hace cinco años porque no encuentra financiación.
¿Todavía se sigue pensando que las películas o las ficciones televisivas protagonizadas por mujeres son para mujeres, para ser consumidas exclusivamente por el público femenino? ¿Seguimos en que lo masculino es sinónimo de “lo universal”?
Exacto, pero quiero rebatir ese argumento. Ahora mismo estoy rodando la serie Vis a Vis y creo que ya tiene casi más público masculino que femenino. Nadie diría que es una serie femenina. Sin embargo, es totalmente femenina porque la mayoría de los personajes son mujeres y hay muy pocos hombres. Esos argumentos son siempre para quitarnos un poco de en medio.
Hace unos días, Clara Lago reconoció que había cobrado menos de la mitad que sus compañeros varones en Ocho Apellidos Vascos. ¿Se nota también esa diferencia salarial?
Sí, y no sólo se discrimina a las actrices por ser mujeres. Las actrices secundarias y de talla XXL, todavía cobramos menos. Es evidente que los hombres siguen cobrando más.
¿Y cómo se llega a esta situación tan discriminatoria para las mujeres? O mejor dicho ¿por qué no se sale?
El tema es que aquí los contratos los gestionan los representantes o los propios actores. Es cierto que la negociación con los hombres siempre es más fructífera que la negociación con las mujeres. En teoría, tanto las asociaciones de actores como las de directores, tienen estipuladas unas bases salariales equitativas para hombres y mujeres que impiden pagar menos a unas que a otros. Pero la realidad es que en el momento en que se empieza a negociar a los hombres se les hace más caso, y se les pone más pasta encima.
Hablemos de Vis a Vis, una serie que transcurre en un cárcel de mujeres y en donde ninguna es lo que aparenta. Tu personaje se llama Goya, menuda casualidad…
Sí, parece premonitorio, ¿no?
¿Es un personaje bueno o se va a pasar al lado oscuro?
No os puedo adelantar mucho de Vis a Vis porque tengo prohibido explicar muchas cosas, pero creo que va a dar mucho que hablar. Es un personaje que no va a dejar indiferente y la tercera temporada viene cargada de cosas muy, muy interesantes.
Esta tercera temporada está producida por Globomedia con Fox y se emitirá sólo en plataformas de pago. ¿Qué opinas del impacto de estos canales en la industria?
A mí me parece una maravilla porque gracias a estas plataformas tenemos más trabajo porque hoy en día, por desgracia, no hay casi producciones a nivel cinematográfico que estén bien pagadas. Las plataformas de pago ofrecen más posibilidades de trabajo y han activado mucho el sector. Realmente, era muy difícil sobrevivir con la producción que había antes.
Eres de familia gallega, ¿te espera algún proyecto por Galicia?
Tengo familia en Pontevedra, en un pueblecito llamado Vila de Cruces, cerca de Lalín. No he trabajado aún en Galicia pero allí tengo buenos amigos como Antonio Durán “Morris”, la actriz Sara Casasnovas y el gran director Andrés Goteira que ahora está triunfando con Dhogs (estrenada en la sección oficial de SITGES 2017) y con el que puede que llegue a trabajar en un proyecto. Sería un honor para mí memorar a mis ancestros.
Confieso que he estado cotilleando tu Instagram y hay una foto que no he podido dejar de ver. ¿Qué se siente al tener la cabeza de Jon Kortajarena entre tus tetas?
Que el mundo te envidia, básicamente. Es el más guapo del mundo y es encantador, cercano y realmente maravilloso. Todos lo adoran.