Miki y todo su team eurovisivo de Televisión Española, ha llorado de emoción al ver el resultado del segundo ensayo de «La Venda» en Tel Aviv. Ciertamente, el regusto que dejó su primera toma de contacto con el escenario el pasado viernes, no fue del todo satisfactorio, dado que a la interpretación le faltaba ritmo, energía y sobre todo fiesta. En este último ensayo, después de pulirlo y ver los puntos mejor trabajados, hemos visto un Miki con un carisma espléndido, con una realización de cámaras muy esmerada y un resultado excelente para poder hacer un buen papel al concurso europeo.
El griego Fokas Evangelinos es el productor a quien el ente público ha querido confiar para producir la canción en Tel Aviv. Él es un gurú de Eurovisión y uno de los grandes creador de actuaciones estelares que han triunfado en el festival, como las de la griega Helena Paparizou en el 2005 o la del ruso Dima Bilan en el 2008.
El resultado de la actuación de Miki es totalmente innovadora: una estructura que representa un edificio con diferentes habitaciones, un gigante inflable de tres metros y una coreografía totalmente milimetrada. Todo eso, combinado con un espectáculo de luz y colores, al más puro estilo de una fiesta Holy, para dar el toque festivo que tanto aporta la canción.
Todos los elementos tienen un sentido coherente con el espectáculo: el edificio, que representa nuestra vida rutinaria y el gigante que nos recuerda a la sociedad que nos domina y que nos encierra en nuestro propio mundo.
El momento más sorprendente de la puesta en escena, es al estribillo de la canción, cuando una microcámara en manos de Miki, graba todo el ambiente del público para ver la euforia que contagia «a La Venda».
Con todo, podemos concluir que el egarense ha hecho bien los deberes antes de aterrizar en Israel, y lo ha plasmado de una manera trabajada y esmerada. Podemos asegurar que será una puesta en escena increíble y muy alejada de lo que hasta ahora nos tenía acostumbrados Televisión Española.
Posteriormente al ensayo, ha tenido lugar la primera rueda de prensa de la delegación, donde en Miki ha interpretado un fragmento de la canción que tantas alegrías le ha dado, «Una luna en el agua» de Txarango.
Tanto el mismo Miki como la jefa de la delegación, Anna Maria Bordas, se han mostrado muy orgullosos del resultado y han puesto de manifiesto el gran trabajo hecho durante los dos últimos meses. El punto culminante de esta intervención ha sido ver cómo el mismo artista escogía, mediante el sorteo tradicional de papeletas, que la actuación se ubicaría en la segunda parte de la final del sábado. Eso es un nuevo punto positivo para una actuación que se prevé totalmente redonda.
A falta sólo de una semana para conocer el resultado final y sus conclusiones, en Miki tiene una agenda intensa y ajetreada antes no lleguen sus tres minutos de gloria. Hablamos con la prensa acreditada para conocer sus impresiones.