El actor Ivan Massagué tiene un enorme talento, un currículum cada vez mayor a base de participar en series, películas y obras teatrales... y una parte de su anatomía de un tamaño considerable, cosa de la cual nunca se ha escondido: "A la edad del pavo me empezó a salir esta nariz que tengo ahora". Son palabras del magnífico intérprete en una entrevista para la revista A cel obert. Massagué acaba de triunfar en las salas con su última película, El Hoyo. En televisión, Benvinguts a la família, Gym Tony, El Barco o su participación en Masterchef Celebrity es de lo último que le hemos visto hacer.
Y encima de los escenarios, ya tardan en ir a ver la excelente obra Aquella nit a la Sala Villarroel, con la actriz Marta Bayarri y dirigidos por David Selvas.
Massagué tiene dislexia y pánico escénico. Casi ná para alguien que se gana la vida actuando: "Esta profesión la he sufrido y la he disfrutado mucho. Soy actor porque no sabía hacer nada más", asegura. Pero falta a la verdad. Porque también ha demostrado que se desarrolla muy bien detrás de los fogones o dando patadas a una pelota: "Era un tio muy nervioso, por eso jugaba a fútbol. No fue más allá, pero sabía que acabaría haciendo alguna cosa relacionada con la expresión corporal". Y hablando de su cuerpo, una parte que destaca a primera vista es su nariz, que le creció en época de adolescente y que en un primer impulso, quiso hacer desaparecer del mapa: "Yo quería ser guapo y me quería operar esta nariz".
Afortunadamente su madre le frenó el ramalazo inicial. ¿Cómo? Poniéndose de acuerdo con un médico para exagerar y enseñarle a su hijo la 'cruda' realidad que le esperaba si decidía pasar por quirófano y empequeñecerse la protuberancia facial: "Me llevó donde me operarían, pero estaba conjurada con el médico y me explicaron que la operación sería como una carnicería brutal". Y se echó para atrás: "Menos mal. Es importante aceptar quién eres, porque al final la vida te lleva al lugar donde tienes que ir". Sabia intervención de la madre. Y sabia decisión de Ivan. No sabemos qué aspecto tendría ahora con otra nariz, pero sabemos seguro que hubiera sido un actor igual de bueno.
Veremos dónde lo lleva la vida, de momento, a una exitosa carrera. Y veremos dónde lleva la vida en Catalunya. Sobre el futuro del procés, Massagué también se moja: "Estoy un poco saturadito. Veo que no hay acción, no hay movimiento, y te come el león. Se tiene que actuar. Y ahora veremos si actúan o lo hacen ver".