Este lunes, el programa La Resistencia de David Broncano tuvo un entrevistado que puso el programa patas arriba. O tendríamos que decir, La Resistencia de David Roncero. Porque así es como le llamó el invitado, a instancias de su mánager, que le troleó ya que iba donde iba. El rapero español El Jincho, uno de los más famosos del panorama actual, se sentó en el late de Movistar+ y fue una carcajada constante:
Una patada en el pecho es la mejor forma de entrar en una pelea. #LaResistencia pic.twitter.com/KASQ2Jjtud
— La Resistencia en Movistar+ (@LaResistencia) March 9, 2020
El rapero madrileño ha tenido un crecimiento espectacular los últimos tiempos gracias a las redes sociales, donde su música ha conquistado a muchos jóvenes con unas letras que hablan de desobediencia, a su estilo de barrio o a temas donde explica que si se lo encuentra la policía y lo obligan a darles lo que tiene, se lo dará todo, menos una cosa: yo le doy lo que usted quiera, pero los porros, no:
La canción que patrocina el cierre de institutos. #LaResistencia pic.twitter.com/kNYhUoxJnz
— La Resistencia en Movistar+ (@LaResistencia) March 9, 2020
Atrás también quedan muchas detenciones y años en prisión, antes de dejar una vida delictiva para pasar a hacer canciones. Él no se esconde ("He ganado más dinero robando que con la música. Real"), pero en una entrevista para el diario El Mundo da detalles de aquel pasado muy significativo, especialmente con respecto a no ver nunca con buenos ojos a la Policía Nacional. Cometió su primer atraco a los 13 años, robando 7.000 euros de una panadería, tiene antecedentes para parar un tren y estuvo casi cuatro años en la cárcel después de un secuestro. "Pero ahora ya soy un rapero, un artista. Ya no sé de delincuencia. Cuando me enseñan un aparato nuevo para delinquir ya no lo conozco. Ahora sé de micrófonos".
De aquella época conserva el odio a los cuerpos de seguridad, por el comportamiento que tenían, no sólo con él, sino con los suyos: "Sé cómo es su trato y cómo son. Unas ratas. Unos cerdos. Abusadores. Real. Y que quede claro que el delincuente soy yo, no mi madre ni mi hermana. Entonces, ¿por qué cuando ellas venían a visitarme a la cárcel también se les faltaba al respeto?". Las registraban, no les hablaban con respeto, les buscaban cosas escondidas... "Todos los policías son iguales para mí, al igual que ellos nos tratan a todos los delincuentes igual". Incluso, asegura, lo más grave que recuerda es "Pegarnos y grabarlo con el móvil. Real". No es de extrañar que su último tema sea La Patrulla: