Tiene una de las carreras más envidiables y respetadas de Hollywood. Fue designada como "la novia de América". Pasará a la historia, entre otros, por darle vida a una Pretty woman o a Erin Brockovich. Su talento es proporcional a su enorme sonrisa. Su buen humor es equivalente a la longitud de sus piernas... Todo eso, y más, es lo que caracteriza a la actriz Julia Roberts.
@juliaroberts
Pero ahora la intérprete ha aparecido como nunca la habíamos visto antes. Roberts hace relativamente poco tiempo que ha abierto una cuenta de Instagram. De hecho, ya le llovieron unas lamentables críticas cuando apareció en una foto al lado de su sobrina, sin maquillaje y jugando tranquilamente a las cartas. La acusaron de que una estrella como ella tenía que cuidar siempre el look que enseñaba, ya fuera en una alfombra roja o en una foto en las redes sociales.
El ensañamiento la cogió por sorpresa y la hundió durante un tiempo. Ella, no daba crédito: "soy una mujer de 50 años y sé quién soy, pero hirieron mis sentimientos y me entristeció que no vieran la dulzura y la felicidad de la foto". Pero lejos de eso, ha seguido colgando imágenes en Instagram, demostrando que sus fans la quieren y consiguiendo, con sólo dos fotos después de abrir la cuenta, que la siguieran 600.000 personas. Ahora ya ha subido 81 fotos y ya tiene 3,6 millones de followers.
@juliaroberts
Ahora, la protagonista de Notting Hill ha ido de invitada al programa de Ellen DeGeneres. Allí, la directora y presentadora de este morning show de los Estados Unidos ha decidido echarle una mano a Roberts y hacer que su cuenta de seguidores llegara al nivel de otras celebrities como las Kardashian. Por eso han puesto en marcha una divertidísima sesión fotográfica inspirada en las hermanas a la que la actriz se ha sumado sin ningún problema, demostrando que a sentido del humor y autoparodia no la gana nadie.
@TheEllenShow
Aparte de hacer posturas de VIP en una playa, o rodeada de amigos falsos, el programa le tenía preparada una sorpresa: un bikini de hilo rosa fucsia sobre un falso escote de plástico que Roberts no ha dudado en ponerse. Una imagen impactante de la que ella misma no daba crédito y que le ha provocado que se le escapara la risa al ver su propio busto.
@TheEllenShow
La guinda del pastel ha sido cuando su compañero de reparto en la película La boda de mi mejor amigo, el actor Dermot Mulroney, ha entrado en plató y ella hacía inútiles esfuerzos por contener la risa y por esconder la recién estrenada -y gigantesca- pechera. Un momento muy celebrado por los espectadores, que justo después del momentazo hicieron caso a DeGeneres y subieron a 600.000 su cuenta de Instagram. Puedes ver la cómica secuencia a continuación:
Que Julia Roberts se ponga lo que quiera encima, que como actriz en la gran pantalla o como invitada de programas, seguirá dejando embelesados a los espectadores con su naturalidad.