Laura Escanes no puede negar que vive un momento personal y profesional fabuloso. La última de las novedades en la vida de la 'influencer' ha sido el retorno de Entre el cielo y las nubes, el pódcast que estrenó en solitario después de bajar la persiana del programa que producía junto a su ex, Risto Mejide. El formato radiofónico daba recientemente el pistoletazo de salida a su segunda temporada con unos invitados demandados a más no poder. Carlos Peguer y Mariang, también conocidos como La pija y la quinqui, dos de los creadores de contenido que más renombre tienen en la red a día de hoy. Durante el episodio, la charla les ha dado para tratar infinitud de asuntos. Uno de ellos es el inminente estreno de La travessa, el 'reality' que la barcelonesa presentará para la OTT de TV3. Un reto al que, según afirma, no pudo negarse.

Por otro lado, era evidente que tanto tiempo de conversación iba a dar para tratar temas más íntimos y controvertidos. El elefante en la habitación es, sin lugar a dudas, la relación de Escanes con el cantante Álvaro de Luna. En más de una ocasión, una de las parejas del momento ha presumido de cuánto se adoran a través de sus perfiles en las redes sociales. La cuestión es que de este fragmento de vídeo que aquí recuperamos se desprende un sentimiento bastante opuesto al amor. O quizás no tan opuesto, pero más natural a la falsedad frecuente de Instagram.

Qué ha dicho Laura Escanes sobre su novio Álvaro de Luna

Los más asiduos seguidores de Carlos Peguer sabrán que es habitual escucharlo hablar de sus exnovios en los episodios de su pódcast. En contraposición, en esta ocasión ha hablado de su actual pareja, enfatizando, entre risas, el hecho de que su nuevo novio no escucha ningún contenido del programa que él locuta, y que solamente le había dado al 'play' el día que charlaron con Pedro Sánchez. Ha sido entonces cuando Laura ha intervenido, preguntando: "¿No os enfada eso?". "A mí hay una parte que me ilusiona que se interesa por mis cosas", ha reflexionado sobre su experiencia, alegando que Álvaro de Luna tampoco escucha su propio pódcast. "Evidentemente, se interesa, pero se puede interesar un poco más y escucharlo", ha añadido. Bien, si no lo escucha, igual tanto interés no tiene. Problema aireado, y ahora de dominio público.

Ante esto, las reacciones de los internautas no se han hecho esperar. "Aprende a tener relaciones sanas antes de dar consejos", sentencia un usuario de la red social X. Otros se remiten a plantear que lo que le pasa a Laura es que se conforma con demasiado poco.

La 'influencer' contesta ante las respuestas

No es nada nuevo que ella no se mantenga al margen. "No me acordaba de lo que era subir un clip de un minuto y que la gente sacara de contexto y sacara conclusiones de una vida entera", ha publicado. Su reflexión está bien, pero parece que se ha olvidado de cómo funcionan las redes sociales. Y eso que son su trabajo. En Internet, el mundo entero tiene la capacidad de opinar.

Laura debería recordar que la red es como la casa de Gran Hermano. Todo se magnifica.