Uno de los sectores más vilipendiados de manera miserable con todo el estallido de la pandemia ha sido y es, el de la cultura. Los teatros fueron los primeros en bajar la persiana y los últimos en abrirla. Y los profesionales que trabajan tienen en todo momento la desagradable sensación de que su carpeta siempre se pone debajo de todo con respecto a problemas a resolver. Ahora, la Generalitat prevé repartir 6,5 millones de euros en el mundo de la cultura como paquete de ayudas para que se recupere después de los estragos de la pandemia... Pecatta minuta. En el programa Planta baixa de TV3 han invitado a Lluís Marco para valorarlo... Y si una cosa tiene este actor inmenso, es que su talento encima de los escenarios es comparable a su labia demoledora a la hora de repartir sopapos a diestro y siniestro. Y de los que hacen falta, hacia arriba.
"¿Son suficientes estos millones?", le preguntan. Y la primera, en la frente: "No. No puede ser que por una parte ahora te dan migajas, y por la otra te cobren (a los autónomos) 5.000 o 6.000 euros que no les has pagado porque dicen que la gasolina que no les has pagado (para ir a trabajar a los teatros) es mentira". Marco ha seguido atizando al modelo de reparto de las ayudas, a los primeros que se inscriban, y no a todo el mundo que se dedica, que se tendrá que conformar con una lista de espera. "Es horroroso. Lo están haciendo muy mal. Sólo se preocupan de dar alguna píldora a la prensa de vez en cuando para tapar su deficiencia de trabajo".
A Marco se le iba calentando la boca. Hasta que ha ampliado su foco en la política y la justicia españolas y en la situación de los presos políticos catalanes desde hace meses: "Acabas de escuchar a Ayuso y Casado. ¿Tú crees que la problemática que existe en Catalunya son realmente unos presupuestos? Cuando somos 2 millones que quisimos hacer un referéndum. Pedimos que queríamos exponer lo que pensábamos y se nos está maltratando constantemente. Yo ya no creo más sandeces. De Ayuso, de Casado, de Guerra, González, sobre todo él. Parece mentira a su edad decir estas tonterías. Mis 40 años de experiencia de esta Constitución torpe es que han incumplido constantemente con Catalunya. Catalunya ha intentado por todos los medios entender a España, pero es imposible: son mentirosos compulsivos".
A Marco ya no había quien lo frenara. Hay pocos que tengan las narices de hablar tan claro: "Os digo a la gente más joven, entre ellos tú, que os engañarán. Os seguirán engañando. Si no se cambia la forma de legislar, la corrupción, que los grupos mediáticos estén todos comprados por este puñetero Estado, es muy difícil cambiar las cosas. Pero no hay que tener miedo de hablar... Mentir tanto sobre las mesas de diálogo, los presupuestos...".
Afortunadamente, los hay, como él, que no tienen miedo de hablar.
Disfrútenlo como actor. Y escúchenlo como ciudadano. Vale mucho la pena. Mucho mejor nos iría a todos si hubiera más Lluís Marco por el mundo.