El presidente de la empresa de cazatalentos Seeliger y Conde, el barcelonés Luis Conde, ha reunido este sábado a múltiples personalidades del mundo empresarial y político en el ya tradicional civet en su masía de Fonteta (El Ampurdán).
Es el sexto año que el empresario catalán organiza esta reunión. Este año, el cariz solidario del acontecimiento ha pasado a un segundo término dada la insólita situación política que se vive en Catalunya. Durante su discurso, Conde ha hecho un llamamiento al "diálogo entre las autoridades políticas" de cara a la convocatoria del referéndum del 1 de octubre.
Entre los invitados, encontramos nombres como los de los consellers de Presidència, Jordi Turull, el de Empresa, Santi Vila y el de Justícia, Carles Mundó. El encuentro también ha contado con la presencia de Ferran Mascarell, delegado del Gobierno en Madrid o de los líderes de partidos políticos catalanes como Inés Arrimades (Ciudadanos), Miquel Iceta (PSC) o Xavier García Albiol (PP).
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Una presencia catalana numerosa, que no obstante, destaca por sus dos grandes ausencias: la del presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont y la del vicepresidente, Oriol Junqueras. Además, el Gobierno español no ha contado con la representación de ninguno de sus ministros, aunque algunos de ellos, como la vicepresidenta Soraya Sánz de Santamaría, que ya había asistido años anteriores, sí que estaban invitados.
Así pues, el civet ha conseguido reunir a un buen número de gente, pero han faltado las cabezas de cartel.