Una de las canciones más famosas del cantante Luis Miguel es aquella versión de los Jackson 5 que dice "la culpa es de la noche, la culpa es de la playa, la culpa es de la lluvia, será que no me amas". Sólo le faltaba para añadir en la ecuación que la culpa es del técnico de sonido, porque en un concierto ha montado en cólera con el encargado del sonido de su gira.

Durante un recital en el Auditorio Nacional de México, como parte de la gira de presentación de su disco México en la piel, demostró tener los nervios a flor de piel, reaccionando de una manera muy violenta con sus técnicos que ha sorprendido a sus fans.

 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 

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Estaba Luis Miguel cantando La fiesta del Mariachi, un tema donde canta "La fiesta sigue bonita toda llena de alegría". Pero Luis Miguel estaba de todo menos alegre. Todo lo contrario, estaba de un mal humor que daba miedo. Rosas blancas en mano, que lanza siempre entre sus fans, de repente se gira hacia la derecha del escenario y le hace una indicación muy contundente al técnico de sonido. Acto seguido, va hacia él y le lanza algunas de las flores que tenían que ser para sus fans. ¿Por qué? Según él, por la baja calidad del sonido mientras él cantaba. Una periodista que asistía al concierto grabó la ira:

Una publicación que ha sido recibida por muchos usuarios sin provocar ninguna sorpresa. Inmediatamente después de ver el vídeo muchos han escrito: "Es una persona oscura y destructiva, amargado con la vida", "Odioso y encima racista. No me gusta", "Si bien su padre fue un desgraciado, él no es el pobre niño amoroso; su personalidad es de divo y tiene pésimo carácter", "Ese güey ya no oye. Por eso va a los de sonido".

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Netflix

Después del éxito de la serie de Netflix sobre su adolescencia y la difícil relación con su padre, Luis Miguel ha empezado una gira, en parte, para redimirse de algunos pecados de un pasado no muy lejano, como el del año 2015 en Mérida, cuando después de una hora esperando y abucheando, el público se marchó de un concierto porque no se presentó en el escenario. ¿Dónde estaba? Según el organizador: "El artista simple y sencillamente se metió a su cuarto, pidió botellas de alcohol y está emborrachándose, por eso es que no se presentó"... Dudamos de que la copa se la tomara acompañado del técnico de sonido.