Como bien saben todos aquellos que tenían a María Teresa Campos como una de sus referentes históricas en cuanto a la televisión, han pasado apenas unos días desde que se cumpliera un año de su fallecimiento, el pasado 5 de septiembre de 2023. Por mucho que durante los últimos meses de su vida fueron muchas las noticias que dejaban muy claro que su estado de salud había empeorado, evidentemente su fallecimiento provocó una enorme tristeza tanto a su familia como a sus seguidores, que no era precisamente pocos.

Eso sí, como suele ser habitual en estos casos, al cabo de unos pocos días de su fallecimiento empezaron a aparecer ya noticias en los medios que hablaban de la herencia que recibirían tanto Terelu Campos como Carmen Borrego, y no fueron pocos los que dieron por hecho que una de las mayores alegrías en este sentido que tendrían las colaboradoras televisivas sería poder ser las propietarias de la joya de la corona de María Teresa Campos en lo que se refiere a propiedades inmobiliarias: la mansión en Molino de Hoz, una de las zonas más VIP de Las Rozas que, además, es una de las zonas más top de Madrid.

María Teresa Campos ya había vendido su mansión en 2021

Una mansión que cuenta con 2.000 metros cuadrados de vivienda, 6.000 de parcela, 12 habitaciones, 15 baños y una piscina climatizada, entre otras cosas y que muchos españoles aún tienen en su retina teniendo en cuenta que se convirtió en una de las localizaciones habituales del reality que siguió a la familia durante unas temporadas.

terelu carmen borrego maria teresa campos telecinco
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Sin embargo, lo que muchos desconocían es que María Teresa Campos ya había vendido esta enorme mansión antes de fallecer, en concreto en 2021, y se la vendió por 2.5 millones de euros a Jose Manuel Gil Roldan, un empresario español que ha decidido convertir a esta mansión en la sede de su empresa Alma en pena, una empresa con una facturación de más de 18 millones de euros tal y como apuntaron en medios como La Razón.

Una mansión que se ha convertido ahora en la sede de la empresa y a la que acuden de forma diaria unos 35 trabajadores que pueden disfrutar de todos los lujos de los que en su día disfrutaron tanto María Teresa Campos como sus hijas, Terelu Campos y Carmen Borrego.