Empezó como modelo de pasarelas pero lo pasó muy mal porque en París le decían que “estaba gorda”. Incluso el mismísimo Yves Saint Lauren la tachó de tener “las piernas gordas”. Por ese motivo, nos cuenta, “dejé todo este mundo y volví a España para estudiar interpretación”. Y los estudios le valieron para actuar en varias series y películas, aunque la popularidad se la brindó el papel de Elena, en la serie Hostal Royal Manzanares. No obstante, la catalana Mónica Pont asegura que ahora tampoco le llueven las ofertas y es “más complicado” ganarse la vida como actriz.

Por ese motivo, en noviembre de 2016 abrió “más el abanico” y debutó como escritora con el libro ‘No estás sola', con el que afirma haber hecho “una labor social para mucha gente”. De hecho, nos avanza que a día de hoy está inmersa en la producción de los guiones que llevarán el libro a la ficción. Y como el mundo de la novela le gusta tanto, ya se encuentra escribiendo su segundo libro. 

Tiene una agenda complicada, pero ahora está relajándose en las paradisíacas aguas de México. No obstante, la actriz y modelo no ha querido perder la oportunidad de hablar alto y claro con EnBlau sobre la relación con su hijo y ex marido, Javier Sagrera; Cataluña y la monarquía. Un trifásico sin igual.

Mónica, como colaboradora puntual de temas de actualidad en Espejo Público, ¿cómo vives la situación de tu amiga Arantxa Sánchez Vicario?

Creo que Arantxa va a salir de todos los problemas que pueda tener porque es una súper mujer y tiene mucha personalidad. Yo también tuve una separación bastante traumática y le he mandado mensajes de apoyo, diciéndole que todo esto se supera y que un día quieres que se termine el mundo, pero al día siguiente te ríes de todo. Y si no aprendes, porque de todo se aprende.

Imagino que son buenas noticias que el juez haya dicho que no tendrá que ingresar a prisión provisional…

Me parece muy buena decisión, ¿por qué Arantxa tiene que ir a la cárcel si no ha matado a nadie? No es una persona que tenga peligro de fuga, ni nada, y me parecía una decisión un poco exagerada. Es una persona conocida, que vive en Miami y siempre ha dado la cara. Es verdad que hay cosas que aún se tienen que arreglar, pero para eso están los abogados. ¡Anda que no hay gente que está haciendo cosas que no son correctas y están en la calle!

Por lo que me cuentas entiendo que estos días has podido hablar con ella…

El problema es que no quiere hablar mucho con sus allegados porque no quiere que se filtre ningún tipo de información, y a mí me parece una decisión muy acertada. Te puedo decir que dentro de todo el follón, ella está bien. Y si la información tiene que salir, que salga de sus abogados, o de ella misma, que es quien tiene que hablar.

¿No te parece injusto que no quiera hablar con sus amigos por miedo a que se pueda filtrar algo?

No porque la entiendo perfectamente y la apoyo. Sé que esto pasará y dentro de nada volveremos a estar sin los maridos y con nuestros hijos en Ibiza.

Hablando de hijos, ¿qué tal la relación con tu hijo Javier?

Veo a mi hijo muy poquito, apenas puedo hablar con él y cuesta mucho mantener una relación a distancia. Aunque, el día de mañana, cuando mi hijo crezca y no haya nadie influenciándole negativamente, se dará cuenta de las cosas. De todas formas, siempre estará ahí porque soy su madre y el roce hace el cariño.

¿Con lo de influenciar negativamente te refieres a tu ex marido, Javier Sagrera?

Sí porque no soy santo de su devoción y sigue con ese odio e inquina hacia mí. Los padres eso no deberían hacerlo porque lo que consiguen es hacer un daño irreparable a sus hijos. Además, él lo hace de una forma muy manipuladora y tergiversa la información, haciendo que al niño le lleguen cosas equivocadas. Por eso digo que mi hijo tiene que crecer y darse cuenta de quién es quién.

¿Sigues pensando que la situación en Cataluña puede afectar la custodia de tu hijo?

Sí y me produce una enorme tristeza porque mi hijo vive en Cataluña y si se independiza, dejaría de formar parte de España. Mi preocupación es saber cómo quedará todo esto y tengo cierto miedo a lo que pueda pasar, porque mi hijo podría salir perjudicado si gana la independencia. Además, mi ex marido me dice que si Cataluña se independiza se irá a vivir con mi hijo a otra parte… ¿Dónde está la sentencia que dicta que mi hijo no podría vivir en Madrid, sino en Cataluña porque es dónde ha nacido? ¿Qué pasará con las sentencias de los padres separados que vivimos en Madrid y en Cataluña? ¿Los niños serán catalanes o españoles? ¿Por qué mi hijo tiene que ser catalán y no español? Me preocupa mucho.

Mónica, a nivel personal, ¿qué opinas de la actual situación en Cataluña?

Es muy triste todo lo que han dicho y hecho los políticos porque, independientemente de que viva en Madrid, me siento catalana y no tendríamos que haber llegado a este punto de dividirnos entre familias y amigos, y estar en una mesa y no poder hablar sobre el tema. Creo que es un trabajo de los políticos, que están haciendo mucho daño, y ellos sabrán cuáles son sus intereses y la información que están y no están dando. Muchas empresas se han ido de Cataluña y han dejado de invertir. Entonces, al final piensas, ¿qué les estás vendiendo a los ciudadanos catalanes? ¿Les estás vendiendo progreso, si lo que está pasando es lo contrario?

¿Cómo le explicas a tu hijo la situación política catalana?

Mi hijo quiere ser español y se ríe de los catalanes independentistas. Es un niño universal, que viene a Madrid y tiene amigos por todas partes. Lo de la independencia lo ve bastante ridículo y alguna vez me ha dicho que son los mismos padres que transmiten el sentimiento independentista a sus hijos. De hecho, la independencia ha dividido a los niños en el colegio, incluso algunos se pelean en las aulas… Todo es ridículo, de verdad.

 

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¿Alguna vez te han menospreciado por ser catalana y vivir en Madrid?

Sí, sobre todo gente de Gerona porque ahí son más cerrados. Me dicen que soy una catalana renegada, que ya no me quieren en Cataluña y que qué vergüenza que sea catalana y piense y diga lo que digo. De todas formas, no hay nada que los catalanes independentistas me puedan decir por las redes y me afecte.

Lucía Etxebarría parece que sí te quería menospreciar cuando te tachó de aprovecharte económicamente de los hombres…

He coincidido con ella en Espejo Público y eso lo dijo en una entrevista porque previamente yo dije que, cuando coincidimos en el reality Campamento de verano, ella era la concursante que tenía peor higiene. Todo fue una pelea de niñas que terminó en los tribunales, pero terminé ganándole las dos causas. A Lucía la demandé por haber hecho estas acusaciones y ella me demandó por decir que su higiene no era muy buena. Lo gracioso es que el juez me dio la razón, porque dijo que eso de la higiene era una percepción personal y no se podía considerar insulto. En cambio, lo que dijo ella sobre mi sí que lo era. De todas formas, ahora cuando me la encuentro intenta ser amable porque sabe que lo hizo mal. Nunca le he querido dar mucha importancia porque Lucía Extebarría tiene un carácter un poco bipolar, y hoy está encantadora y mañana te insulta.

Pero a raíz de sus declaraciones, varias personas se subieron al carro y te tacharon de lo mismo…

Mira, soy famosa desde hace 20 años y tengo clarísimo que en todo este tiempo he escuchado de todo, porque tienes gente a la que le gustas mucho y otra a la que no. No hago caso ni de las criticas, ni de los halagos. Mientras mi día a día vaya bien, sea feliz y haga feliz a los que me rodean, tengo bastante. Lo que digan los demás, no me lo creo porque opinar es gratis y cada uno puede decir lo que quiera. Pero… toda esta gente que hace esto, ¿cuánto tiempo tienen para aburrirse? Si yo no tengo tiempo ni para leer las noticias mías que se publican, ¡cómo para ponerme a opinar de gente que no conozco!

Hablando de dinero, dijiste que en el año 2000 le prestaste al rey Felipe VI 10.000 pesetas para que pudiera hacer esquí acuático, ¿ya te las ha devuelto?

¡No, qué va! Ni me las ha devuelto, ni me las devolverá. Además, ya no las quiero. Lo que pasa es que aquel día Felipe no llevaba suficiente dinero, y como no se creía que le iban a cobrar por hacer esquí acuático, pues su amigo me pidió si le podía prestar dinero. Entonces, le pagué su esquiada pero nunca más me ha devuelto el dinero. El problema es que los miembros de la Familia Real han ido siempre con una jeta increíble y se creen que por ser quien son, no tienen que pagar nada. Es una vergüenza.

¿Te consideras monárquica?

No soy nada monárquica y considero que es un atraso que en España tengamos Familia Real. Además, la Familia Real se ha desvirtuado mucho y creo que no deberíamos mantenerles. Es más, son gente normal y como tal, deberían trabajar como todos. De todas formas, me caen bien y pienso que el rey Juan Carlos ha hecho mucho y es un buen relaciones publicas. Y por otro lado, considero que Felipe VI está haciendo muy bien su labor y es un tío muy bien preparado. Por ejemplo, con todo eso de la independencia, se ha mojado y eso a mí me ha gustado.

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Mónica, para terminar, hace poco has declarado en el marco de la ‘Operación Pitiusa’…

Todo ha sido porque el padre de mi hijo contrató a un investigador privado, que me investigó de forma ilegal e hizo unos informes. Mi ex pareja compró mis datos, los de mi familia y de la empleada del hogar que tenía entonces, de la Seguridad Social y Hacienda para saber qué teníamos, si trabajábamos o no, si estábamos dados de alta… Y que ese señor sea quien tenga la custodia de mi hijo, habiendo conseguido la información de forma ilícita, es una vergüenza. Aquí, al final, ¿quién gana? ¿El que va a joder al otro? ¿El que busca la información de manera ilícita?

¿Con qué fin se obtienen tus datos y secretos personales?

Porque mi ex marido quería obtener información para la custodia de mi hijo y para que le pasara una pensión, pero el fin no justifica los medios. 

¿Y cómo lo encajaste?

Con cierto enfado. ¿Por qué mis datos tienen que ser públicos, cuando es algo privado? Lo que hicieron, de poner en conocimiento unos datos privados, se llama apropiación indebida de datos privados y es indignante. He hecho las cosas bien, he sido una buena madre, una buena esposa y una buena persona. Pero cuando el amor se acaba, se acaba y hay un momento en el que dices “prou”. Y ahí, cuando dije basta, empezó el infierno. Pero bueno, no me queda otra que aceptarlo y vivir de la mejor manera posible. Mi ex marido ha ganado la batalla, pero la guerra es de largo fondo y mi hijo crecerá y se dará cuenta de las cosas. Es verdad que me he perdido la infancia y adolescencia de mi hijo, pero ya tendré otras cosas que me compensarán de alguna manera.