La actriz y modelo catalana Mónica Pont está devastada. No sólo ha roto su relación de escasos ocho meses con el empresario gallego José Cacheiro, sino que la independencia de Cataluña podría hacer tambalear la relación de la barcelonesa con su hijo.

Tal y como ha contado Mónica en el plató de Sábado Deluxe, si Cataluña se convierte en un estado independiente, su hijo no podrá ir a visitarla a Madrid. Y ha añadido, refiriéndose a lo que le dijo el juez que hace tres años le quitó la custodia de su vástago: "Tiene que permanecer en el lugar geográfico donde nació y usted lo ha llevado a un país extranjero. "Pero, Madrid es España, ¿no?" Ha sentenciado la modelo.

Vestida con un look total black, compuesto por una blusa con semitransparencias y una falda de tubo con vuelo, Mónica ha revelado que tiene la postura más difícil porque "tengo que hacer que estudie y ser la mala de la película, ya que su padre prefiere que corra en karts. Si yo me opongo a esto, ¿le perderé? Yo quiero el bien de mi hijo, y el bien de mi hijo es que los niños tienen que estar preparados para el día de mañana".

Pero, lo peor del caso, ha proseguido la catalana, es que Javier Sagrera, padre de la criatura y con quien Mónica se casó en agosto de 2002, podría llevarse a su hijo a vivir a Italia, en caso de que Cataluña se independizara, porque de esta forma "se podría seguir dedicando a los karts".

Esta, pero, no es la primera vez que Mónica visita el Deluxe. En abril de este año ya se sentó y se refirió a sí misma como "madre frustrada".

La modelo y actriz, que ha explicado que la relación con su hijo "le cuesta más en invierno" porque solo le ve dos fines de semana al mes, ha confesado que su última visita a la cadena de Fuencarral favoreció la relación con su hijo: "Gracias a lo que dije, mi hijo empezó a llamarme más y hubo un acercamiento".

Por esta razón, la ex concursante del reality Campamento de verano no ha querido perder la oportunidad de dedicar unas emotivas palabras a su retoño: "Te quiero mucho, muchísimo y si algún día quieres no verme, yo siempre estaré con la puerta abierta esperándote". Acto seguido, la cara de la catalana ha quedado cubierta por un manto de lágrimas.

Finalmente, la autora de la novela No estás sola, ha confesado que gracias a la escritura se siente mucho más liberada y ha querido mandar un mensaje a todas las mujeres que están viviendo una situación similar a la suya: "Cuanto más alta la depresión, más alto tiene que ser el tacón".

¿Cambiará Mónica los platós de televisión para convertirse en una experimentada coach emocional?