Ona Carbonell y su pareja, Pablo Ibáñez, ya son padres. Los deportistas de élite, que se conocieron entrenando sus respectivas disciplinas hace ya once años, han dado este miércoles la bienvenida a Kai, un niño que tiene un nombre muy especial.

La nadadora olímpica y su pareja, Pablo Ibáñez, han dado la bienvenida a Kai en un hospital de Barcelona. La última vez que vimos a la deportista fue en un evento de Isdin

Kai es un nombre originario de Hawaii y significa 'mar', y la misma palabra en japonés quiere decir 'océano'. Que la pareja haya elegido llamar así a su primogénito lo hace todo más especial si cabe, pues la catalana, de 30 años, lleva toda la vida ligada al agua.

La nadadora olímpica, de 30 años, anunció que había sido madre con un bonito mensaje en Instagram, con una foto en banco y negro de los tres, que ahora forman una feliz familia.

Un embarazo que no paró a Ona Carbonell

Tanto el embarazo como el parto fueron muy bien. De hecho, a comienzos de verano vimos a Ona en un evento de Isdin, marca de la que es embajadora desde hace ya muchos años.

La firma de cosméticos y fotoprotectores más vendida en España y la deportista llevan varios veranos colaborando con el objetivo de concienciar a la población –sobre todo a los más pequeños– de la importancia de proteger la piel adecuadamente de los rayos solares.

Ona hizo su última aparición antes de dar a luz a su pequeño Kai en el Hospital Can Ruti de Badalona (Barcelona) en un evento de Isdin, marca de la que es imagen este año. Allí habló de su embarazo: "Me encuentro muy bien, la verdad. A pesar del contexto y de estar todo el día en casa, estoy disfrutando de la familia, de los perros, de la tranquilidad, y esperando el día con muchísimas ganas".

Aparcó la natación, pero no dejó de trabajar

La recién estrenada maternidad de Ona Carbonell era muy deseada por la pareja, y sobre todo para ella, pues se retiró temporalmente de la piscina para centrarse en su familia y en los miembros que estaban por llegar. 

"Quiero dedicar más tiempo a mi familia, cuidarla como se merece, y también ampliarla. Como mujer y deportista, conciliar mi vida profesional con la personal implica asumir decisiones como esta y dejar el deporte a un lado temporalmente, sin que esto signifique que vaya a renunciar a mi carrera como nadadora”, dijo.

Kai ha llegado en el momento idóneo para sus padres, Ona y Pablo. Ambos se conocieron hace once años en el centro de alto rendimiento (CAR) de Sant Cugat, donde coincidían en los entrenamientos de sus respectivos deportes. La relación se fraguó en la más estricta intimidad hasta 2016, cuando ambos posaron juntos por primera vez en la alfombra roja de una gala benéfica.

Con Isdin hizo su última aparición pública

En estos meses, la ganadora del programa culinario de La 1, MasterChef Celebrity, no ha estado entrenando ni nadando como lo hacía antes, pero sí que ha seguido con sus actividades, como la que desarrolla como embajadora de la mencionada firma.

"Soy embajadora de Isdin desde hace años y lo que queremos es concienciar a las personas de que hay que disfrutar del sol, pero siempre bien protegidos", declaraba la olímpica en el que será, sin duda, su verano más especial.

La nadadora olímpica, que ha expuesto toda su vida su piel en el agua, está muy concienciada con la protección solar y los daños que causa la exposición sin la fórmula adecuada, por eso quiso ser embajadora de Isdin hace años.

A lo largo de este tiempo, la catalana y la marca también se han unido por un futuro sostenible y por la conservación de los océanos, un medio que Ona siente como su segunda casa y que no ha dudado plasmarlo en el nombre de su primer hijo.