Uno de los MITOS, con mayúsculas, de la televisión de los 90, icono para toda una generación, es, sin duda, la maravillosa Pamela Anderson. La vigilante de la playa más famosa de la televisión, la socorrista que tenía millones de espectadores embelesados delante del televisor cuando la veían corriendo por las playas de Santa Monica y Honolulu con su bañador rojo. Hace tres décadas escribió su nombre bien grande al participar en la mítica serie al lado de David Hasselhoff, y poco después, todavía se hizo más archifamosa, aunque ella no lo quería, por un vídeo íntimo al lado del músico de la banda Mötley Crüe, Tommy Lee. Unas imágenes donde la pareja hacía lo que ya todo el mundo sabe y que corrió como la pólvora. De hecho, se volvió a hablar hace unos meses, con motivo del estreno de la serie Pam and Tommy, donde el centro de la trama era precisamente la cinta de vídeo que fue de mano en mano, sin que ella pudiera hacer nada por evitarlo.
Ahora, Anderson ya tiene 55 años, y su carrera ha ido de más a menos, con filmes como Barb Wire o Scary Movie 3, o con alguna portada en el Playboy, aunque el pasado año recibió fuertes elogios al estrenar el musical Chicago en Broadway haciendo el papel de 'Roxie Hart', que en el cine interpretó Renee Zellwegger. Pero lamentablemente, ya no tiene la fama interplanetaria que tenía treinta años atrás cuándo era una de las protagonistas de Baywatch. Ahora, lejos ya de aquella 'C.J. Parker' inolvidable que la hizo famosa, su nombre vuelve a estar de actualidad. Y no por ninguna cuestión relacionada con la situación en Catalunya, ella que es una firme defensora del procés. Tampoco por ningún papel. Pero sí por su presencia en un documental imperdible de Netflix que se estrenará dentro de poco. Su vida da para mucho, y era inevitable que la plataforma hiciera un documental que lo petará. De momento, ya se ha visto el trailer de 'Pamela, una historia de amor', donde repasa su vida, también las partes más oscuras y donde ha sorprendido a los fans por su imagen, alejada de la que nos tiene acostumbrada ante cámaras, y mostrándose al natural, sin maquillaje y poco reconocible. Si esperan verla así, no la reconocerán...:
En sus redes sociales suele publicar imágenes de hace tiempo, momentos pasados nostálgicos donde tenía un aspecto bien diferente al de ahora. Pero en este documental ha querido mostrarse a vuelapluma, serena, tranquila, optimista a pesar de lo que vivió con todo el tema del vídeo ("tuve que hacer una carrera con los trozos que quedaban de mí, pero no he sido una damisela con problemas. He vivido situaciones muy duras y me he sobrepuesto a todas ellas") y guapísima.
Pamela Anderson, ahora y siempre, maravillosa.