"Només vull veure bitllets de cent" ("Sólo quiero ver billetes de cien"). Es lo que canta Rosalía y medio mundo desde hace unas semanas. Pero también es lo que desde hoy y hasta principios de diciembre, cantarán los que tengan una entrada para el concierto, pensando en la pasta que pueden sacar en la reventa. Nunca una canción había sido tan apropiada para ilustrar la locura que se está viviendo las últimas horas con el concierto que dará la cantante Rosalía en el Palau Sant Jordi de Barcelona el próximo 7 de diciembre. Cojan Fucking money man y se harán una idea de lo que están dispuestos a pagar sus fans para ver a la cantante del momento en el espectacular concierto que se espera que dé en la capital catalana.
@rosalia.vt
La fiebre por la artista de Sant Esteve Sesrovires ha quedado sobradamente demostrada este viernes cuando se han agotado las entradas en cuestión de pocos minutos. Colapso habitual en la red y sólo unos afortunados podrán verla en directo interpretando sus éxitos, quedando embelesados con su voz y sus looks. Miércoles, problemas con la preventa. Y viernes, problemas con la venta general. Colas y más colas virtuales, muchas decepciones, muchas quejas, lleno total, sold out, y la primera consecuencia para poner remedio a la frustración de los que se han quedado sin entrada: la reventa. Pero una reventa de locura: 1.800 euros por una entrada que oscilaba entre 30 y 70 euros.
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Las páginas web de Live Nation y Ticketmaster, donde se podían comprar las entradas, se han colapsado por la avalancha de peticiones que han recibido. En Twitter varios usuarios se han quejado de que eran muy complicadas de conseguir.
"Dios nos libre del dinero"... Librarse de las críticas ahora ya es imposible. Más valdría que fueran pensando en un segundo concierto... Pero volverá a pasar lo mismo. Tra, tra.